GENTE

DE COPAS POR EL ANGLIRU

Cada día prueba sus rampas uno de los campeones del pelotón, pero la subida del Angliru, la cumbre asturiana en la que se disputará el 12 de septiembre la etapa reina de la Vuelta Ciclista a España, ya no es sólo un reto al pundonor y la fuerza física de los avezados y sufridos profesionales de la bicicleta. Mientras los Olano, Zülle, Escartín, el Chava Jiménez, Heras y otros experimentados corredores de la ronda española han viajado a propósito hasta esta cumbre de la sierra del Aramo para enfrentarse a las descomunales rampas del puerto y conocer in situ la dureza que le...

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Cada día prueba sus rampas uno de los campeones del pelotón, pero la subida del Angliru, la cumbre asturiana en la que se disputará el 12 de septiembre la etapa reina de la Vuelta Ciclista a España, ya no es sólo un reto al pundonor y la fuerza física de los avezados y sufridos profesionales de la bicicleta. Mientras los Olano, Zülle, Escartín, el Chava Jiménez, Heras y otros experimentados corredores de la ronda española han viajado a propósito hasta esta cumbre de la sierra del Aramo para enfrentarse a las descomunales rampas del puerto y conocer in situ la dureza que les aguarda, los desniveles de hasta el 22% de esta cima del centro de Asturias son también motivo de las más insólitas iniciativas. La última "hazaña" la protagonizó anteayer un camarero de Ourense, Saturnino González, de 38 años, que ganó la apuesta por la que se había comprometido a subir la ya mítica montaña en bicicleta y sosteniendo una bandeja con 12 copas de coñac. Vestido con uniforme de faena, Saturnino encaró la pendiente con la mejor de las disposiciones y armado de tesón y capacidad de sufrimiento. Tiempo atrás remontó, entonces con copas de cava, las también peliagudas rampas a los Lagos de Covadonga. En la cumbre del Angliru, sudoroso, el ourensano declaró desde el corazón de la sierra del Aramo que lo que le mueve a tales proezas no es más que "la devoción por el ciclismo y el gusto de dar alegría a la gente". En su palmarés figuran también la subida al Urkiola, en el País Vasco, y la Cuestiña de Cañeda, en su tierra, que realiza habitualmente el 1 de enero.- ,

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