SEVILLA99 La jornada de ayer

Montalvo: "La plastilina no tenía ni un rasguñito"

Aquello era un guirigay. Nadie oyó cómo sonaba el teléfono móvil de Vicente Añó, el jefe de la organización. Nadie lo oyó, pero debió de sonar porque poco después se acercó Añó a Niurka Montalvo, que contaba su vida y su noche mágica por enésima vez. "Niurka, el ministro", le dijo Añó. Así que dio un paso atrás y atendió la llamada de felicitación de Mariano Rajoy. Un respiro en el agobio. Un respiro en la polémica."Perfecto", se oía gritar detrás a Rafael Blanquer, el entrenador de Montalvo, la persona que trabajó pacientemente con su ángulo de vuelo, con su potencia, con su velocidad de bati...

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Aquello era un guirigay. Nadie oyó cómo sonaba el teléfono móvil de Vicente Añó, el jefe de la organización. Nadie lo oyó, pero debió de sonar porque poco después se acercó Añó a Niurka Montalvo, que contaba su vida y su noche mágica por enésima vez. "Niurka, el ministro", le dijo Añó. Así que dio un paso atrás y atendió la llamada de felicitación de Mariano Rajoy. Un respiro en el agobio. Un respiro en la polémica."Perfecto", se oía gritar detrás a Rafael Blanquer, el entrenador de Montalvo, la persona que trabajó pacientemente con su ángulo de vuelo, con su potencia, con su velocidad de batida. "Perfecto", repite. "Se la tenía que jugar así. Tenía que entrar lo más rápido posible en la tabla. Tenía que ajustar al milímetro, hacerle la tangente perfecta a la plastilina. Máxima velocidad, máximo ajuste". Perfecto. 7,06. Oro. "Y no fue nulo. Si no hay huella en la plastilina la decisión queda a la percepción del juez. Y el juez se tomó su tiempo y levantó la bandera blanca. Yo he visto desde la perpendicular la batida y he visto que no fue nulo".

"Gracias, Iberia". ¿Quién es el osado? José Sanleandro, el marido de la campeona, se lo cuenta a un italiano. "Es que conocí a Niurka en el aeropuerto de Barajas. Fue en el 93. Yo iba a La Habana y ella volvía de competir, junto a otros atletas cubanos. Y el avión salió con seis horas de retraso. Así nos conocimos".

Clic. Montalvo ha colgado. Ya puede contar su aventura otra vez. Avidez en las orejas de los periodistas. Aún no se sabe nada del jurado de apelación pero nadie duda de qué color va a caer la decisión. "Es que ni un rasguñito", repite Montalvo. "Ni un mordisquito. La plastilina está intacta".

Niurka, May dice que fue nulo tu salto, le cuentan. "Yo no lo creo. Yo pienso que Fiona no sabe perder. Así que todo es un problema suyo".

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