Italia domina las clases menores
Al batir a Max Biaggi, lo que consiguió Àlex Crivillé, fue impedir la jornada completa de los pilotos locales y salvar un día mediocre de la representación española. En la categoría reina, ni Sete Gibernau (Honda) ni Carlos Checa (Yamaha) se acercaron esta vez al podio. El primero, que se estrenaba a lomos de la Honda de cuatro cilindros, se clasificó sexto, y el noi de Sant Fruitós acabó séptimo. Siguen tercero y cuarto en el Mundial."Ha sido un buen resultado", explicó Gibernau. "Quería terminar esta primera carrera con la V-4 y he acabado luchando con Roberts, que ganó las dos primeras de l...
Al batir a Max Biaggi, lo que consiguió Àlex Crivillé, fue impedir la jornada completa de los pilotos locales y salvar un día mediocre de la representación española. En la categoría reina, ni Sete Gibernau (Honda) ni Carlos Checa (Yamaha) se acercaron esta vez al podio. El primero, que se estrenaba a lomos de la Honda de cuatro cilindros, se clasificó sexto, y el noi de Sant Fruitós acabó séptimo. Siguen tercero y cuarto en el Mundial."Ha sido un buen resultado", explicó Gibernau. "Quería terminar esta primera carrera con la V-4 y he acabado luchando con Roberts, que ganó las dos primeras de la temporada. Me falta experiencia, sobre todo en la puesta a punto de la moto". Checa, por su parte, fue rotundo: "Tenemos problemas y debemos trabajar para resolverlos porque quiero lograr en buen resultado en Montmeló". Juan Borja fue noveno y José Luis Cardoso tuvo que abandonar.
Hasta llegar a la carrera de 500, los italianos habían dominado delante de su público: Valentino Rossi (Aprilia) ganó en dos y medio y Roberto Locatelli (Aprilia) lo hizo en la prueba inaugural de 125. Sus triunfos fueron diferentes. Rossi se impuso con claridad, después de dominar toda la carrera. Locatelli lo hizo al sprint, delante de un grupo de 12 pilotos.
En 250, dos de los candidatos quedaron eliminados inmediatamente. A los pocos segundos de ver el semáforo verde, en plena aceleración, el campeón del mundo Loris Capirossi (Honda) embistió al piloto que partía desde la posición preferente de la parrilla, el también italiano Marcellino Lucchi (Aprilia).
Lucchi acabó en el suelo, y a las pocas vueltas Capirossi vio la bandera negra que lo descalificó y le obligó a regresar a boxes. Pero tardó más de la cuenta en hacer caso a los jueces, y el episodio le costó una carrera de suspensión. En la pista ya no hubo más historia. El excéntrico Rossi, con nuevo color de moto y de mono a tono con su carácter, se paseó frente a sus seguidores y tuvo tiempo de pensar en la celebración. Esta vez, sin embargo, se mostró comedido.
Rossi venció con dos segundos de ventaja sobre el alemán Ralf Waldmann (Aprilia) y el japonés Tohru Ukawa (Honda). Éste sigue destacado al frente del Mundial. Por parte española, David García (Yamaha) acabó 15º y Fonsi G.Nieto (Yamaha) 17º.
En 125, la carrera resultó emocionante hasta el último metro. En el grupo de 12 pilotos que ocuparon las primeras posiciones todos conservaron su opción de pisar el cajón hasta la última vuelta. Ganó Locatelli por delante de su compatriota Marco Melandri (Honda) y del japonés Noboru Ueda (Honda), mientras que Emilio Alzamora (Honda) terminó sexto, por primera vez este año fuera del podio. Sin embargo, sigue segundo en el Mundial y recortó un punto al líder, el japonés Masao Azuma, que ahora le lleva 19. Jerónimo Vidal (Aprilia) fue 12º, Gelete Nieto (Honda) 17º, y Pablo Nieto (Derbi) 22º.