El bocado de Wise a Marcelino
Marcelino fue el único que no se dio por enterado -"¿de verdad? no he sentido nada"-, pero el bocado existió. Preso de la frustración y de su carácter irrefrenable, Dennis Wise zanjó una leve discusión con una respuesta desproporcionada: propinó un mordisco canino al brazo del central del Mallorca, en el segundo tiempo. El gesto, por salvaje, refleja los modos de un jugador que figura en todas las listas negras del fútbol británico.En Inglaterra, Wise gasta fama de terrible. Pequeño y rocoso, en su estilo se reconocen todos los signos de su primer club, el Wimbledon, cuna de algunos malhechore...
Marcelino fue el único que no se dio por enterado -"¿de verdad? no he sentido nada"-, pero el bocado existió. Preso de la frustración y de su carácter irrefrenable, Dennis Wise zanjó una leve discusión con una respuesta desproporcionada: propinó un mordisco canino al brazo del central del Mallorca, en el segundo tiempo. El gesto, por salvaje, refleja los modos de un jugador que figura en todas las listas negras del fútbol británico.En Inglaterra, Wise gasta fama de terrible. Pequeño y rocoso, en su estilo se reconocen todos los signos de su primer club, el Wimbledon, cuna de algunos malhechores legendarios. A la cabeza de todos está Vinnie Jones, protagonista de innumerables incidentes, todos festejadísimos por el propio Jones.
Sin llegar a la altura de las hazañas de Jones, Wise ha sido frecuente cabecera de portada de los tabloides ingleses por sus incontroladas costumbres dentro y fuera del terreno de juego.