La fe mantiene vivo al Rayo

El Rayo tuvo que marcar cuatro goles para arrancar un modesto puntito en el último minuto del partido. Sólo la fe mantuvo vivo al equipo madrileño que venía a Mallorca a por el liderato, pero que se tuvo que conformar con no salir derrotado. Enfrente tuvo un rival que jugó toda la segunda parte con diez jugadores por la expulsión de su meta Valbuena, al finalizar los primeros 45 minutos.En dos ocasiones a lo largo del partido el equipo que dirige Juan de Ramos tuvo que remontar una desventaja de dos goles. El Mallorca B se puso 2-0 con una facilidad pasmosa y en menos de cuatro minutos había h...

El Rayo tuvo que marcar cuatro goles para arrancar un modesto puntito en el último minuto del partido. Sólo la fe mantuvo vivo al equipo madrileño que venía a Mallorca a por el liderato, pero que se tuvo que conformar con no salir derrotado. Enfrente tuvo un rival que jugó toda la segunda parte con diez jugadores por la expulsión de su meta Valbuena, al finalizar los primeros 45 minutos.En dos ocasiones a lo largo del partido el equipo que dirige Juan de Ramos tuvo que remontar una desventaja de dos goles. El Mallorca B se puso 2-0 con una facilidad pasmosa y en menos de cuatro minutos había hecho añicos la zaga visitante.

Al final, un rebote mal resuelto en el área isleña permitió al Rayo empatar y salvar su imagen en el Lluís Sitjar. El reparto de puntos deja al conjunto rayista a tiro de cañón del liderato y al Mallorca sumido en grandes cavilaciones, debido a que se encuentra muy cerca de la zona de peligro.