"La solución no es que me echen"

El de Louis Van Gaal sonó como un grito desesperado, como el último deseo de un condenado. El técnico del Barça aceptó que, en la situación actual, es difícil que la gente crea en él y en los jugadores. Pero siguió reclamando confianza porque está convencido de que el equipo puede resolver esta situación. "Tras perder este partido ante el Villarreal y con las últimas tres derrotas anteriores es fácil que la gente diga "fuera Van Gaal". Pero la solución a esta crisis, para mí, no es ésta. La solución es siempre, creo, tener tranquilidad, trabajar, entrenar y comunicarnos".Con expresiones bastan...

El de Louis Van Gaal sonó como un grito desesperado, como el último deseo de un condenado. El técnico del Barça aceptó que, en la situación actual, es difícil que la gente crea en él y en los jugadores. Pero siguió reclamando confianza porque está convencido de que el equipo puede resolver esta situación. "Tras perder este partido ante el Villarreal y con las últimas tres derrotas anteriores es fácil que la gente diga "fuera Van Gaal". Pero la solución a esta crisis, para mí, no es ésta. La solución es siempre, creo, tener tranquilidad, trabajar, entrenar y comunicarnos".Con expresiones bastante medidas pero con aspecto poco convincente, Van Gaal prosiguió su discurso en medio de una avalancha de preguntas referentes a su destitución o a su hipotética dimisión. "Cada palabra mía dirigida ahora al socio puede ser contraproducente. Tras una derrota como ésta es muy difícil que la afición confíe en mí y en los jugadores. Pero debemos mantener la calma y deben darnos confianza. No hay otra solución. Ya demostramos el año pasado que podemos resolver problemas como éste", agregó.

La inmediata visita del presidente Josep Lluís Núñez al vestuario tras el partido no fue, según Van Gaal, para revalidar su confianza en él. "Hablamos del partido. Todos estamos decepcionados". El técnico holandés se negó a creer que algunos socios esperasen otra derrota del Barça para que le destituyeran, y lanzó una defensa cerrada del presidente cuando le recordaron que el público pidió la dimisión de Núñez. "La gente es muy emocional. Pero ya en casa deben pensar que este presidente lleva más de 20 años al frente del club y que ha ganado muchos títulos", indicó. "Y pueden pensar que debe seguir porque es lo mejor para el club". Aceptó Van Gaal que la línea de mejora mostrada por el equipo en la segunda parte frente al Deportivo y en la primera parte ante el Brondby se había roto. Pero insistió en que ayer el equipo tuvo también un poco de mala suerte. "Pienso que el Villarreal ha llegado cuatro o cinco veces a nuestra portería y ha marcado tres goles. Nosotros hemos llegado muchas veces y hemos marcado uno. Fallamos ahí y eso no puedo explicarlo. Estamos en una crisis, porque no es normal no marcar cuando llegamos en cuatro ocasiones al uno contra uno ante el portero y no hay goles".

Sin embargo, el técnico desestimó cualquier insinuación en el sentido de que el vestuario está dividido. "No estoy de acuerdo en esa apreciación", respondió a la pregunta de si le bastaba el apoyo del presidente. "Los jugadores han luchado mucho y eso confirma que están con su entrenador. Pero les faltó confianza. Tras los dos goles siguieron intentando ganar hasta el final".

Los jugadores también demostraron su decepción. "Cuatro derrotas. Situación difícil, crítica. Pero hay un mañana", indicó Pep Guardiola. "Hemos creado ocasiones a medio metro de la portería, pero hemos vuelto a perder", agregó. El centrocampista azulgrana añadió: "Debemos olvidarnos de cosas personales y centrarnos en eso. Las cosas se están complicando realmente. Nos cuesta ganar los partidos porque no marcamos goles". Guardiola afirmó que el equipo no se siente impotente, pero que empieza a sentir la necesidad de ganar inmediatamente. "Estamos muy abajo en la clasificación y hay que remontar". Figo resumió la situación: "Hemos tocado fondo. No puede haber nada peor. No podemos recurrir como excusa la mala suerte. Tenemos que ser lo más fuertes posible para sacar adelante esto. Otro tipo de decisiones no nos competen". Rivaldo dio su punto de vista: "La afición tiene toda la razón en hacer lo que hace. Viene al campo y paga. No hemos jugado bien. Hemos tenido ocasiones y no hemos marcado".

Josep Lluís Núñez se negó a realizar comentarios. El vicepresidente azulgrana Joan Gaspart volvió a comparecer: "En la larga historia centenaria del Barça hemos pasado momentos peores, pero eso no es una excusa. El socio tiene razón para estar disgustado y se expresa con enfado", dijo intentando explicar la actitud del público, que coreó la frase "Núñez dimisión". "El socio no se merece lo que está ocurriendo".