El PSC cierra filas en torno al candidato
Los socialistas catalanes apuestan por reforzar claramente al candidato, José Borrell, como fórmula para salir de la crisis que sacude a la cúpula del socialismo hispano. Los dirigentes del partido se muestran perplejos por la facilidad con que se ha llegado a la situación actual. Pero su secretario de organización, José Montilla, fue muy claro ayer al definir lo que según él es la opinión mayoritaria entre los afiliados. "Quien al final pondrá la cara es el candidato". Por lo tanto, su criterio es que esta crisis no debe cerrarse en falso y la solución sólo puede consistir "en un reparto de f...
Los socialistas catalanes apuestan por reforzar claramente al candidato, José Borrell, como fórmula para salir de la crisis que sacude a la cúpula del socialismo hispano. Los dirigentes del partido se muestran perplejos por la facilidad con que se ha llegado a la situación actual. Pero su secretario de organización, José Montilla, fue muy claro ayer al definir lo que según él es la opinión mayoritaria entre los afiliados. "Quien al final pondrá la cara es el candidato". Por lo tanto, su criterio es que esta crisis no debe cerrarse en falso y la solución sólo puede consistir "en un reparto de funciones que refuerce al candidato y evite la celebración de un congreso extraordinario".Esto no obsta para que Montilla, y el primer secretario del PSC, Narcís Serra, opinen que lo mejor es una solución pactada, no traumática. Serra está estos días en Madrid participando, como todos los dirigentes territoriales, en los esfuerzos para sacar al socialismo del atolladero.
Algunos portavoces del PSC sostienen que, llegados a este punto, la cuestión ya no radica en si tiene razón Borrell o la tiene Almunia, sino en "terminar con este espectáculo". La urgencia proviene del convencimiento de que la crisis daña sus expectativas electorales, en un momento en que las elecciones autonómicas y municipales están ya a la vista. Pasqual Maragall, ya en precampaña, no cesa de proclamar, y ayer lo repitió, que en su partido la bicefalia no es problema. Y que tampoco debería serlo en el PSOE.