Suker controla su ritmo cardiaco

Suker no falló el penalti, aunque tuviera que lanzarlo dos veces. Se tocaba el cuello antes del lanzamiento. Y tenía su explicación: "Quiero saber si antes de lanzar mi ritmo cardiaco es de 120 pulsaciones. Eso quiere decir que estoy tranquilo". "Estaba muy seguro de lo que iba a hacer", añadió tras marcar su tercer gol. Croacia celebraba un hecho histórico: estar en cuartos en su primera participación. Miroslav Blazevic, el técnico, lo resumió así: "Nunca un país tan pequeño como Croacia ha alcanzado un resultado como este", dijo. "Incluso hemos llegado a eliminar a un equipo como Rumania, qu...

Suker no falló el penalti, aunque tuviera que lanzarlo dos veces. Se tocaba el cuello antes del lanzamiento. Y tenía su explicación: "Quiero saber si antes de lanzar mi ritmo cardiaco es de 120 pulsaciones. Eso quiere decir que estoy tranquilo". "Estaba muy seguro de lo que iba a hacer", añadió tras marcar su tercer gol. Croacia celebraba un hecho histórico: estar en cuartos en su primera participación. Miroslav Blazevic, el técnico, lo resumió así: "Nunca un país tan pequeño como Croacia ha alcanzado un resultado como este", dijo. "Incluso hemos llegado a eliminar a un equipo como Rumania, que posee una tradición futbolística de sobra conocida". "Me alegra encontrarme de nuevo con mis amigos alemanes en cuartos de final", dijo el seleccionador croata. "Recuerdo que hace dos años nos eliminaron de la Eurocopa (2-1). No olvidamos que son nuestros amigos , pero todo el mundo sabe que no existe mayor placer que el de vencer a los amigos".Para los rumanos, la derrota significó la despedida de Hagi, su líder carismático, y de Iordanescu, un técnico que no pudo ganarse la estrella de general, caso de haberse clasificado (es coronel). Ambos anunciaron que el de ayer fue su último partido.