FÚTBOL 37ª JORNADA DE LIGA

El Mallorca peca de exceso de confianza

Los de Cúper empataron ante el Salamanca

En su intento por lograr una plaza que le permitiría jugar con los mejores de Europa la próxima temporada, el Mallorca pecó de exceso de confianza en su capacidad defensiva y despreció las posibilidades goleadoras del Salamanca. El gol tempranero que marcó el argentino Gabi Amato y que le mantuvo empatado con el Athletic de Bilbao, en la segunda plaza durante buena parte de la tarde, marcó el desarrollo de un partido que tuvo controlado el Mallorca en todo momento pero que, al final, logró empatar Popescu. Fue un resultado que dejó a los dos equipos sin premio. Los hombres de Rojo buscaban la ...

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En su intento por lograr una plaza que le permitiría jugar con los mejores de Europa la próxima temporada, el Mallorca pecó de exceso de confianza en su capacidad defensiva y despreció las posibilidades goleadoras del Salamanca. El gol tempranero que marcó el argentino Gabi Amato y que le mantuvo empatado con el Athletic de Bilbao, en la segunda plaza durante buena parte de la tarde, marcó el desarrollo de un partido que tuvo controlado el Mallorca en todo momento pero que, al final, logró empatar Popescu. Fue un resultado que dejó a los dos equipos sin premio. Los hombres de Rojo buscaban la permanencia matemática y los de Cúper, delirios de grandeza, pero el empate de ayer remite a la última jornada para conocer el desenlace definitivo.El Mallorca dispuso ayer de una ocasión idónea para intentar culminar la mejor temporada de su historia. Tiene el equipo mallorquín cubiertos sus objetivos iniciales casi desde el principio, tiene asegurada una plaza en la Recopa y se enfrentaba a un rival atenazado por la necesidad y que no ofreció ningún argumento futbolístico, en parte por la presión y en parte por los errores del técnico Txetxu Rojo. Aun así, Cúper prefirió no arriesgar con el marcador a favor y acabó cediendo dos puntos ante el peor Salamanca en casa de los últimos tiempos.

Salamanca: Stelea; Sito, Corino, Loren, Paulo Torres (Taira, m

43, Silvani, m. 56); Popescu, Rogerio (Iturrino, m. 70), Giovanella, Vellisca; César Brito y Pauleta.Mallorca: Roa (Kike, m. 45); Olaizola, Marcelino, Iván Campo, Romero; Eskuza, Valerón (Soler, m. 74), Engonga, Stankovic; Moya (Ezquerro, m. 59) y Amato. Goles: 0-1. M. 8. Moya tiene toda la banda izquierda para él, llega hasta la frontal del área desde donde centra al segundo palo para que Amato marque de cabeza. 1-1. M. 74. Popescu marca desde dentro del área en una jugada embarullada, tras recibir un pase de Vellisca. Árbitro: López Nieto. Mostró cartulina amarilla a Corino, Sito, Amato, Stankovic y Olaizola. 22.200 espectadores en el estadio El Helmántico.

A pesar de las facilidades de un descompensado Salamanca, Cúper descargó la responsabilidad de buscar la Champion League en la cara defensiva del equipo, quiso mantener a toda costa el 0-1, pero el gol había llegado demasiado temprano y acabó permitiendo respirar a un Salamanca que no pudo arrancar tan buenos resultados como sus competidores en la lucha por el descenso.

El Mallorca no tuvo tiempo de plantarse sobre el terreno de juego cuando su táctica de contención se vio más que justificada. Un tremendo error en la situación de Paulo Torres dejó a Moya solo en la parte derecha del ataque, con tiempo suficiente para pensar y ver cómo Amato se levantaba para armar un cabezazo certero. Fue un mazazo para el Salamanca dejarse encajar un gol tan tontamente. Era el minuto ocho y el Mallorca tenía ante sí el partido deseado. El conjunto de Rojo se derrumbó. La imagen de equipo ofensivo, con ideas con el balón en los pies, desapareció de la retina de los aficionados charros. La banda izquierda de la defensa del Salamanca era una autopista gratuita para quien se adentrara en ella, Popescu no sabía a qué jugaba, el centro del campo no estaba engrasado como otros días y arriba Pauleta y Brito tenían dificultades para ver algún balón. El Mallorca pusionó líneas, dio un paso atrás y fue un equipo casi impenetrable. Confiaba Cúper en el contraataque para rematar al Salamanca, pero no contó con la tarde inmaculada del guardameta Stelea. Rojo vio que el equipo estaba roto y a la media hora decidió sacar del campo a Paulo Torres para que Taira tratara de ordenar las ideas. El Salamanca mejoró la imagen, pero no dio apenas sensación de peligro.

En la segunda parte, la lesión de Taira frenó el ataque total que había emprendido el Salamanca. A partir de ese momento no hubo táctica, sólo valía el corazón, la fe, la garra y la necesidad de empatar. Popescu enmendó su partido con un gol.

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