DESPEDIDA POR BRUJA

Una asistenta rumana ha interpuesto una demanda por despido improcedente después de que la echasen de su trabajo por brujería, en uno de los más curiosos procesos de la historia del tribunal de Botosani (este de Rumania). Vasilica Ciocoiu, que trabajaba como señora de la limpieza en el Ayuntamiento del pueblo de Ripiceni (distrito de Botosani), ha demandado al teniente de alcalde Catalin Paduraru, que la despidió tras sorprenderla «encendiendo velas sobre una piedra y maldiciendo a la dirección», según informó ayer el diario Evenimenul Zilei, de Bucarest. Ciocoiu se quejó de que ...

Una asistenta rumana ha interpuesto una demanda por despido improcedente después de que la echasen de su trabajo por brujería, en uno de los más curiosos procesos de la historia del tribunal de Botosani (este de Rumania). Vasilica Ciocoiu, que trabajaba como señora de la limpieza en el Ayuntamiento del pueblo de Ripiceni (distrito de Botosani), ha demandado al teniente de alcalde Catalin Paduraru, que la despidió tras sorprenderla «encendiendo velas sobre una piedra y maldiciendo a la dirección», según informó ayer el diario Evenimenul Zilei, de Bucarest. Ciocoiu se quejó de que el alcalde, Ioan Burciu, y todos los concejales del municipio decidieron confiscarle una de sus herramientas de trabajo, la escoba, que consideraron instrumento de su brujería, tras analizar el caso y tomar la decisión de echarla de su puesto laboral. La señora de la limpieza sostiene que ella se limitó a «ahuyentar a los espíritus malos del Ayuntamiento» y niega haber echado ningún maleficio sobre nadie. El cuerpo del delito en este proceso es la piedra sobre la que la supuesta bruja encendió las velas y que el alcalde presentó a los jueces. -