Romero hará una oferta de integración para cerrar la crisis de los socialistas valencianos

Los socialistas valencianos dirimirán su futuro el día 8 de noviembre. Joan Romero, secretario general del PSPV, pretende impedir a toda costa que prospere la rebelión contra la ejecutiva surgida del último congreso del partido celebrada hace cuatro meses. Para ello sugirió una propuesta "constructiva" que se debatirá antes de la moción de censura. Romero evitó ser explícito, pero según fuentes de la ejecutiva se baraja la creación de un órgano territorial intermedio con competencias electorales que permita integrar todas las fuerzas del PSPV.

Cipriá Ciscar, secretario de org...

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Los socialistas valencianos dirimirán su futuro el día 8 de noviembre. Joan Romero, secretario general del PSPV, pretende impedir a toda costa que prospere la rebelión contra la ejecutiva surgida del último congreso del partido celebrada hace cuatro meses. Para ello sugirió una propuesta "constructiva" que se debatirá antes de la moción de censura. Romero evitó ser explícito, pero según fuentes de la ejecutiva se baraja la creación de un órgano territorial intermedio con competencias electorales que permita integrar todas las fuerzas del PSPV.

Cipriá Ciscar, secretario de organización del PSOE, se desplazó ayer a Valencia mandatado por Joaquín Almunia para intentar pacificar la federación socialista valenciana a la mayor brevedad. Pero la iniciativa la tomó Romero convencido de que la rebelión interna sólo puede conducir a un desastre en la próxima convocatoria electoral. La ejecutiva del PSPV aceptó anticipar la convocatoria de un comité nacional extraordinario, tal como pretendía Almunia. La reunión se producirá el 8 de noviembre, pero el posible debate de la moción de censura irá precedido de una oferta de integración por parte de Romero. "He pedido un ejercicio de responsabilidad a la ejecutiva para que se acabe el debate interno en el seno de la federación", comentó.

El secretario general pidió una semana de plazo para elaborar "propuestas constructivas" que se presentarán al comité nacional y reiteró que las "diferencias en el PSPV "se resuelven aquí y sólo aquí".

Respaldo de la ejecutiva

Si la propuesta fuera aceptada, la moción de censura caería por su propio peso. Romero persigue dar "un paso definitivo" para el que aseguró contar con "el respaldo de la ejecutiva". El secretario evitó dar detalles y aseguró que sólo Almunia tendrá conocimiento de la propuesta antes que el comité nacional.La iniciativa de Romero estaría inspirada en el modelo de los socialistas catalanes y persigue establecer un órgano de ámbito territorial intermedio entre la ejecutiva y el comité nacional, máximo órgano entre congresos. La nueva instancia, que debería ser avalada por el comité nacional, tendría competencias sobre cuestiones de ámbito electoral, sobre todo en lo relativo a la elaboración de las candidaturas. El nuevo órgano permitiría aglutinar a todos los sectores del partido para superar la división.

La mayoría de los secretarios comarcales del PSPV, que se reunieron con Romero y Ciscar, tenían preparado un documento en el que rechazaban la intervención del secretario de organización federal para solucionar la crisis de la federación valenciana, al considerarle "juez y parte".

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La intervención de Ciscar a lo largo de toda la jornada quedó en un segundo plano de observador. El secretario de organización del PSOE acudió a Valencia con la orden expresa de cerrar la división entre los socialistas valencianos antes de la constitución del comité federal, convocado para el 15 de noviembre. Pero con la espinosa petición de no poner en cuestión la posición de Romero como secretario general del PSPV.

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