Almunia refuerza contactos con grupos progresistas para la "causa común" socialista
El objetivo del PSOE de atraer a colectivos progresistas a "una causa común" socialista choca con la imagen que ha trascendido, tras la reunión celebrada con Izquierda Unida (IU) el viernes, de que se intenta fraguar un clásico pacto entre partidos. La dirección del PSOE quiere romper la imagen de "hiperpoliticismo" por lo que pondrá el énfasis en las reuniones que su secretario general, Joaquín Almunia, comienza hoy y seguirá hasta que termine el mes.
Representantes de Greenpeace, Federación de Mujeres Progresistas, defensores de la sanidad pública, asociaciones de consumidores y dirig...
El objetivo del PSOE de atraer a colectivos progresistas a "una causa común" socialista choca con la imagen que ha trascendido, tras la reunión celebrada con Izquierda Unida (IU) el viernes, de que se intenta fraguar un clásico pacto entre partidos. La dirección del PSOE quiere romper la imagen de "hiperpoliticismo" por lo que pondrá el énfasis en las reuniones que su secretario general, Joaquín Almunia, comienza hoy y seguirá hasta que termine el mes.
Representantes de Greenpeace, Federación de Mujeres Progresistas, defensores de la sanidad pública, asociaciones de consumidores y dirigentes sindicales son los interlocutores que estos días tendrá el PSOE.A pesar del buen sabor de boca que la dirección socialista tiene tras la reunión del viernes con una delegación de Izquierda Unida encabezada por Julio Anguita, enseguida ha caído en la cuenta de que la imagen de un pacto entre partidos desnaturaliza la llamada de Joaquín Almunia al mundo progresista nada más ser elegido secretario general del PSOE.
Hay que evitar la idea de que se está de nuevo en el "hiperpoliticismo", señala un miembro de la dirección del PSOE, al asegurar que la operación que han puesto en marcha tiene que superar los esquemas tradicionales de pactos entre partidos, o al menos, lo intentarán. Para afianzar más esa idea, las reuniones con el Partido Democrático de la Nueva Izquierda, que lidera Diego López Garrido, y con el presidente de Iniciativa per Catalunya, Rafael Ribó, no se celebrarán hasta septiembre.
La agenda de Almunia empieza con una reunión a primera hora de la mañana con el secretario general de UGT, Cándido Méndez. Después tendrá lugar la reunión de la comisión ejecutiva federal en la que tendrá un lugar preferente una discusión sobre la situación de la sanidad. Por la tarde, Almunia verá a representantes de Greenpeace y de la Federación de Mujeres Progresistas.
El análisis sobre la sanidad será puesto en común mañana con los representantes de la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública. La Unión de Consumidores de España pasará por el despacho de Almunia el miércoles.
Todos estos colectivos sociales han sido requeridos por el nuevo secretario general del PSOE para comprobar si comparten el duro análisis de la acción política del Gobierno del PP que realiza el PSOE. Si coinciden, Almunia les pedirá que trabajen en común para "demostrar a los ciudadanos que es posible hacer otra política", decía el líder socialista en su carta a cada uno de ellos. El objetivo último de esta acción también se expresaba en la misiva con toda claridad: "Conseguir que el PP pierda las próximas elecciones".
Los dirigentes del PSOE van a intentar hacer "otra política", aunque no saben si les saldrá bien. Un partido tan "institucionalizado" como el PSOE y que con triunfos electorales aplastantes no se había visto en la necesidad de dialogar en exceso con los movimientos sociales los considera ahora imprescindibles.
Todas las plataformas de carácter progresista que existan en este país no serán ajenas para este partido. Esta intención de trabajar "por abajo", según expresión de un miembro de la ejecutiva al referirse a grupos y colectivos sociales ajenos a los partidos, tendrá que ser compatible con los acuerdos a los que puedan llegar con IU, dado que muchas de las propuestas que recojan de los movimientos sociales podrán y tendrán que traducirse en iniciativas parlamentarias.
Los miembros socialistas que asistieron a la reunión, encabezada por Joaquín Almunia, aseguran que el coordinador general de IU, Julio Anguita, estuvo "encantador, divertido y distendido". Estos calificativos de dirigentes socialistas hacia el líder de IU no tenían precedentes.