El Mallorca vuelve a quedarse con las ganas
El cuadro balear disputará la promoción de ascenso por segunda temporada consecutiva
El Mallorca disputará la fase de promoción a Primera por segunda temporada consecutiva. Como consuelo no está mal. Muchos lo querrían. Pero al conjunto balear su presupuesto le exigía mayores logros. O al menos, no tener que esperar hasta el último momento, hasta una promoción de negativos recuerdos para el Mallorca.El pasado año le eliminó el Rayo Vallecano, merced a un golazo de Onésimo. Y, curiosamente, podría ocurrir que en el actual volviera a cruzarse con el conjunto vallecano. Para saberlo tendrá que esperar hasta el próximo domingo, cuando en Primera se decida el último puesto de ascen...
El Mallorca disputará la fase de promoción a Primera por segunda temporada consecutiva. Como consuelo no está mal. Muchos lo querrían. Pero al conjunto balear su presupuesto le exigía mayores logros. O al menos, no tener que esperar hasta el último momento, hasta una promoción de negativos recuerdos para el Mallorca.El pasado año le eliminó el Rayo Vallecano, merced a un golazo de Onésimo. Y, curiosamente, podría ocurrir que en el actual volviera a cruzarse con el conjunto vallecano. Para saberlo tendrá que esperar hasta el próximo domingo, cuando en Primera se decida el último puesto de ascenso y el de promoción. Otros de sus posibles rivales son el Extremadura, el Celta y el Oviedo.
La victoria ante el Villarreal no fue suficiente para obtener el ascenso directo, ya que el Salamanca no falló en Vitoria. Muy al contrario. Y eso resultaba imprescindible hicieran lo que hicieron los de Llompart.
El Mallorca cumplió con su papel, pero a la postre se quedó a medias. Galca, como de costumbre, fue el jugador clave en su victoria. El Luis Sitjar estuvo más pendiente de lo que ocurría en otros campos que del partido entre el Mallorca y el Villarreal. El público coreó los goles del Leganés ante el Albacete, que aseguraban como mínimo la permanencia, y enmudeció con los tantos del Salamanca en Mendizorroza.
El Mallorca, sin ideas en ataque e impotente para superar la ordenada defensa visitante, se fue ahogando en su propia incapacidad para resolver un partido que estaba obligado a ganar. Los nervios le atenazaban. Pero de pronto, al empezar la segunda parte, apareció Constantin Galca. El internacional rumano se echó el equipo al hombro y con dos jugadas prodigiosas solventó la papeleta.
Marcó un golazo desde 35 metros y dio un pase magistral a Carlos para que rubricara el segundo tanto. Con ello el conjunto mallorquín aseguró la permanencia, que llega más como un castigo que como un premio, ya que el equipo balear mandó en la tabla toda la temporada y sólo perdió la plaza de ascenso directo en la pasada jornada, precisamente, ante el Salamanca. Muchos recuerdan hoy la salida de Víctor Muñoz del banquillo, quien fue despedido por el presidente cuando el equipo figuraba como líder de la categoría.