FÚTBOL: SEGUNDA DIVISIÓN

Lágrimas y dedicaciones

El triunfo sobre el Leganés provocó el delirio en Mérida. El presidente, José Fouto y el entrenador, Jorge D'Alesandro lloraron y la afición dedicó el ascenso a Molina y a Juanito, una promesa y un mito del fútbol, que con los colores del Mérida dejaron sus vidas en las carreteras. Los jugadores, tras el pitido final, pasearon por el campo una gran pancarta con una foto de Óscar Molina. En las gradas los aficionados gritaban: "¡la, ia, ia, Juanito no se olvida!". Fue el grito compartido mirando hacia el cielo. El Hornito de la Rambla, que alberga la imagen de la patrona de la ciudad, Sant...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El triunfo sobre el Leganés provocó el delirio en Mérida. El presidente, José Fouto y el entrenador, Jorge D'Alesandro lloraron y la afición dedicó el ascenso a Molina y a Juanito, una promesa y un mito del fútbol, que con los colores del Mérida dejaron sus vidas en las carreteras. Los jugadores, tras el pitido final, pasearon por el campo una gran pancarta con una foto de Óscar Molina. En las gradas los aficionados gritaban: "¡la, ia, ia, Juanito no se olvida!". Fue el grito compartido mirando hacia el cielo. El Hornito de la Rambla, que alberga la imagen de la patrona de la ciudad, Santa Eulalia y la Plaza de España fueron los lugares elegidos por los aficionados y la plantilla para la fiesta.

El Mérida retorna a Primera por calidad, por presupuesto, por infraestructura; pero, sobre todo, por la ilusión y la fe ciega de su presidente, Pepe Fouto. Un tipo extravagante, rico y enamorado del fútbol. Ayer Fouto vibró, se emocionó y sufrió como en la temporada del debú del equipo en la Liga de las Estrellas.

Entonces, en el último partido del campeonato, con el Mérida ya en Segunda, tuvo un arranque que sonó a machada: "Mañana mismo comenzamos a confeccionar el equipo para volver a Primera. Sergio Kresic sigue". El pronóstico se ha cumplido a medias. El Mérida logró el ascenso, pero el técnico croata se quedó en el camino. El honor le corresponde a Jorge D'Alesandro y a Manolo, el ex jugador internacional que ahora comparte banquillo con el técnico.

Archivado En