Entrevista:

"¡Claro que podemos ir tranquilas en metro!"

Son gemelas en todo menos en la edad. Nada, que no les salen las cuentas. La una dice tener 38 años, la otra asegura que 35. ¿Quién miente? Gracia y Sole Olayo, eso sí, madrileñas las dos, forman parte más que de una familia de una multitud que completan otros 17 hermanos. Son tan idénticas que juegan con su parecido, lo mismo en la vida real que en la ficción, utilizando las dos la misma foto en documentos oficiales o confundiendo a sus rivales en las intensas timbas de mus que organizan bajo el lema: "¡Contra las Olayo, sin desmayo!". Debutan juntas en escena y estrenan a Las Veneno como par...

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Son gemelas en todo menos en la edad. Nada, que no les salen las cuentas. La una dice tener 38 años, la otra asegura que 35. ¿Quién miente? Gracia y Sole Olayo, eso sí, madrileñas las dos, forman parte más que de una familia de una multitud que completan otros 17 hermanos. Son tan idénticas que juegan con su parecido, lo mismo en la vida real que en la ficción, utilizando las dos la misma foto en documentos oficiales o confundiendo a sus rivales en las intensas timbas de mus que organizan bajo el lema: "¡Contra las Olayo, sin desmayo!". Debutan juntas en escena y estrenan a Las Veneno como par. Antes siempre fueron tres. Hacen, naturalmente, de gemelas, Las hermanas Sue, dos chiquitas de Totana que cruzan el Atlántico en busca de su padre y de la gloria, huyendo del peor porvenir. "¡Antes muertas que en la huerta!".Pregunta. Las gemelas siempre han tenido mucho tirón en el mundo del espectáculo.

Respuesta. Y en la vida real, bastante morbo. Despiertas mucha curiosidad en la gente y es muy divertido engañar a los chicos.

P. ¿Cuánto han cambiado Las Veneno?R. La compañía ha sufrido una reconversión. Los problemas económicos se llevan mejor en familia. Antes, Las Veneno estaban en una fase apta para sobrevivir, pero no para montar nada.

P. Hace unos años, a las puertas de este mismo teatro, montaban ustedes numeritos antes del estreno.

R. En eso también hemos cambiado, la juerga callejera se acabó. Seguimos con la comedia, pero ya no hay participación del público como la había antaño.

P. El público de Madrid parece que las quiere.

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R. Sí, a pesar de haber cambiado tantas veces de caras. Comprenden nuestra desfachatez interpretativa y nos gusta trabajar aquí. Sole vive en Barcelona, pero yo [asegura Gracia] valoro lo fácil que en Madrid resulta mezclarse con todo el mundo. Eso, y el metro, compensa las incomodidades de esta gran urbe.

P. ¿Pueden ir en metro tranquilamente?

R. ¡Claro! Sólo nos reconocen ligeramente cuando hacemos publicidad en televisión.

¿Qué fue de las hermanas Sue? Teatro Infanta Isabel (calle de Barquillo, 24). Espectáculo prorrogado hasta el 25 de mayo.

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