Engonga da el triunfo a Valdano

Que el Valencia vive al borde de un ataque de nervios, lo sabe hasta el último mono de Mestalla. Ayer se enteró el resto de España, si tuvo la paciencia de soportar hora y media de fútbol de la peor estopa. No hay más cera que la que arde. Esto es lo que hay. Todos los tópicos para constatar lo mismo. El que diseñó este equipo no estuvo muy acertado, que digamos. Pero ayer el Valencia recurrió a la heroica (no le queda otra cosa) para defender una victoria con la que se encontró después del error en la salida del joven guarda meta del Compostela, Rafa, y un execelente e inesperado remate de e...

Que el Valencia vive al borde de un ataque de nervios, lo sabe hasta el último mono de Mestalla. Ayer se enteró el resto de España, si tuvo la paciencia de soportar hora y media de fútbol de la peor estopa. No hay más cera que la que arde. Esto es lo que hay. Todos los tópicos para constatar lo mismo. El que diseñó este equipo no estuvo muy acertado, que digamos. Pero ayer el Valencia recurrió a la heroica (no le queda otra cosa) para defender una victoria con la que se encontró después del error en la salida del joven guarda meta del Compostela, Rafa, y un execelente e inesperado remate de espaldas de Engonga, héroe de la noche. Un triunfo agónico que le permite al Valencia, en cualquier caso, salir de una espiral de empates en casa que empezaban a provocar problemas de esquizofrenia entre la hinchada. Al final, en el último instante, el Compostela, que fue un equipo sin apenas convicción, tuvo el empate a tiro de piedra. Pero lo echó a la papelera.El Valencia desplegó toda la batería de sus carencias (infinitas) y el Compostela abandonó mayores ambiciones y se replegó en torno al joven guardameta valenciano Rafa. El resultado fue patético. Una invitación a que Mestalla se vaya despoblando. Pero como el fútbol es siempre imprevisible, en medio de este estercolero surgió Engonga para ejecutar una chilena digna de Hugo Sánchez.