Pistas para padres

Una guía con más de dos mil direcciones atiende las necesidades infantiles

, Cuenta la autora del libro, la periodista María Luisa Müller, que este proyecto nació el día en el que llegó a Madrid con un bebé bajo el brazo y muy pocas referencias para entendérselas en el circuito habitual de los padres madrileños. No existía una guía que dijera dónde podía comprar un juguete de madera, encontrar un pediatra, un otorrinolaringólogo cuando al niño le diera otitis, buscar un guiñol, una tienda de disfraces o la pastelería donde encargar el pastel de cumpleaños.Así nació Madrid de los peques, un volumen con más de 2.000 direcciones, agrupadas en una veintena de se...

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, Cuenta la autora del libro, la periodista María Luisa Müller, que este proyecto nació el día en el que llegó a Madrid con un bebé bajo el brazo y muy pocas referencias para entendérselas en el circuito habitual de los padres madrileños. No existía una guía que dijera dónde podía comprar un juguete de madera, encontrar un pediatra, un otorrinolaringólogo cuando al niño le diera otitis, buscar un guiñol, una tienda de disfraces o la pastelería donde encargar el pastel de cumpleaños.Así nació Madrid de los peques, un volumen con más de 2.000 direcciones, agrupadas en una veintena de secciones, relacionadas todas con los niños: se empieza por el embarazo y parto, le siguen los temas de salud, seguridad y prevención, viajes y transporte, ¿quién cuida a tu hijo?, jugueterías, compras, fiestas, ocio, talleres, lectura, colegio, música, el niño actor, naturaleza, deportes, la primera hucha, los minusválidos, ayuda y solidaridad y, por último, una agenda útil para los más pequeñajos. En el libro se habla largo y tendido sobre las fiestas infantiles. Explica Müller que, además de preocuparse de si la tarta debe ser de chocolate o fresa, los padres deben saber algo más: todo lo que pudiera ocurrir en una fiesta con niños es responsabilidad de ellos. "Así, si un niño sufre un accidente, y sus padres lo exigieran, los organizadores tendrían que afrontar todos los gastos médicos. Lo mismo sucede si tiran un jarrón por la ventana y le da a un vecino en la cabeza".

Para evitar desgracias de este tipo, el texto ofrece también todas las opciones para festejar fuera de casa, parques verdes y acuáticos, zoológicos, restaurantes con menú infantil, maquillajes infantiles, tiendas con auténticos arsenales de caramelos y chucherías. "Hay que contribuir a que los niños crezcan como personas libres, creativas y responsables, con derecho a la elección", añade la autora, que dedica al ocio de los pequeñajos más de cien páginas. Antes de devorar todas estas direcciones, Müller aconseja a los padres no forzar situaciones: "No siempre es fácil arrastrar al pequeño al museo, aunque sea importante para su desarrollo intelectual, sacarle de paseo, o que lea un cómic. Forzarles sólo provocará rechazo. Lo ideal es que toda la familia disfrute".

Para ello, ofrece, además de los museos de arte, otros curiosos como el postal y telegráfico o el de Telefónica. Incluye también una lista de talleres que han recuperado y transformado en profesión una vieja costumbre: la de contar cuentos. Para iniciar a los niños en la lectura, y a la vez convertir el aprendizaje en un juego, la autora propone un juego familiar: "Además de los cuentos, leer los anuncios de las calles, acomodar a los niños un rincón donde puedan organizar su primera biblioteca y no negarle la lectura de un cómic".

Madrid de los peques. (Editorial SPA)

Precio: 1.950 pesetas.

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