Kiko: "El balón ahora es un cocodrilo"

El Atlético vive la primera crisis de la era Antic: malos resultados (no gana desde hace casi un mes) y, finalmente, hasta mal juego (horroroso ante el Valencia y el Rayo). A diferencia de otras épocas, las del Gil más feroz, el equipo dispone de cierto margen para resolver sus problemas en la cocina. Y eso es lo que intentó ayer: el cuerpo técnico y la plantilla se reunieron en el vestuario y reflexionaron sobre la preocupante situación. De la terapia de grupo salieron problemas, concretos. Uno de ellos, de lo más grave. "El balón ya no es un balón, es un cocodrilo que te muerde los Pies", di...

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El Atlético vive la primera crisis de la era Antic: malos resultados (no gana desde hace casi un mes) y, finalmente, hasta mal juego (horroroso ante el Valencia y el Rayo). A diferencia de otras épocas, las del Gil más feroz, el equipo dispone de cierto margen para resolver sus problemas en la cocina. Y eso es lo que intentó ayer: el cuerpo técnico y la plantilla se reunieron en el vestuario y reflexionaron sobre la preocupante situación. De la terapia de grupo salieron problemas, concretos. Uno de ellos, de lo más grave. "El balón ya no es un balón, es un cocodrilo que te muerde los Pies", dice Kiko.

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Problemas de autoconfianza. De todos los defectos que el Atlético reconoce tener, éste es el más grave. El equipo ha perdido confianza en sí mismo. Ya no es el líder sólido que lo intentaba todo porque sabía que todo le iba a salir. Ahora pierde la moral con facilidad: porque el Rayo marca un gol en su primer ataque, porque Esnáider falló un penalti, porque el Rayo marcó un gol nada más reanudarse la segunda mitad... "Empieza a faltamos confianza", admite Solozábal, "y hay que luchar para que esto no ocurra". El más gráfico en su análisis fue Kiko: "Se dan una serie de circunstancias que te queman psíquicaménte. Y la cosa acaba en que el balón ya no es un balón; es un cocodrilo que te muerde los pies".Errores tácticos. El Atlético construyó el bicampeonato a partir de un sistema de juego convincente. Sin embargo, Antic cree haber descubierto ahora errores tácticos importantes. No es que el sistema no funcione, sino que ya no se sigue al pie de la letra. El equipo pierde distancia entre líneas y desobedece máximas sagradas del esquema de juego. Un ejemplo: los laterales (Geli y Toni) nunca pueden subir a la vez al ataque. Ante el Rayo sí lo hicieron. "No tenemos la misma concentración y chispa que el año pasado'', reconoce Solozábal.

Pérdida de agresividad. El rasgo más característico del Atlético dé Antic era la agresividad. Ya no. El equipo, y así lo admiten tanto el entrenador como los jugadores, ha perdido revoluciones, No muerde. Simeone, el máximo exponente de la agresividad, reclaama que el equipo vuelva a moverse a golpe de tambor: "Hay que poner la cara, el pecho y lo que haga fálta".

Cansancio. El Atlético parece cansado. "La gran cantidad de encuentros hace que no estemos tan finos", explicó Simeone. Para Antic, todo es un efecto de los malos resultados, que "aumentan el cansancio y bajan el estado anímico de los jugadores". Sin embargo, el vestuario se conjuró ayer para retirar dicho pretexto de su diccionario. Solozábal fue rotundo: "Es muy pronto para buscar excusas en el cansancio. Si en dos meses decimos que estamos cansados, en siete será un desastre".

Presión descoordinada. La presión ordenada y decidida sobre la posesión de balón del rival fue una de las claves del Atlético 1995-96. Todas las versiones del vestuario coinciden en reconocer cierta descoordinación al aplicarla ahora. "No se presiona en., grupo", denuncia Antic. Y sin una presión correcta, el rival mueve el balón a gusto y no tiene problemas para romper la adelantada línea defensiva del Atlético.

Puntería. Ni en movimiento ni a balón parado. Al Atlético le cuesta Dios y ayuda ver puerta.El dato más rotundo procede de los penaltis: tres ha lanzado y tres ha fallado. Pero Kiko reconoció que la falta de puntería no se reduce sólo a esas situaciones: "En el último mes, cada jugador de ataque hemos fallado por lo menos cúatro o cinco ocasiones claras".

Una plantilla corta. Radomir Antic apostó por un once titular poderoso y una plantilla justa. Las lesiones han convertido su arriesgada decisión en un problema mayúsculo. El Atlético acusa en exceso las bajas. Así lo ha demostrado en las repetidas ausencias de Caminero y Kiko. Radomir Antic, de momento, rechaza posibles incorporaciones: "Sigo pensando que hay plantilla para tres competiciones".

Precipitación y prisas. Lo dice Kiko: "El año pasado jugábamos con más tranquilidad. Tocábamos, tocábamos y no entrábamos a saco hasta que lo veíamos claro". Ahora falta paciencia y sobran las prisas. Basta que no entre el balón en la portería contraria en los 15 primeros minutos para que el equipo se convierta en un manojo de nervios y precipitación.

La Liga de Campeones. Participar en la máxima competición europea está desgastando al Atlético. "Cansa mental y físicamente, está claro", reconoce Solozábal. Hablamos de un plantel de jugadores que viven su primera, y puede que única, experiencia en la máxima competición continental. En ocasiones, sin querer, han perdido de vista la Liga pensando en la aventura europea.

Problemas de clasificación. "No miro la clasificación; me pongo malo", dice Simeone. Efectivamente, repasar la situación del AtIético puede ser un problema: el Barcelona está a 12 puntos y el Madrid, a diez. Por eso, el equipo se ha comprometido a no mirar la tabla, ni hacia arriba ni hacia abajo. Se trata de no ver más allá del próximo partido. La plantilla también reconoce que hablar de sucesos ocurridos a terceros [ayudas arbitrales, por ejemplo], no viene bien. La premisa es clara: "No debemos obsesionamos con el Barça y el Madrid; tenemos ya unos cuantos problemas propios que resolver".

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