AJEDREZOLIMPIADA EN ARMENIA

"Kaspárov quiere el oro y la caída de Iliumyínov"

El maximalismo de Gari Kaspárov se pondrá a prueba desde hoy en una doble vía durante la Olimpiada de ajedrez en Yeverán (Armenia), con más de 130 países participantes. Ante el tablero, el campeón del mundo de la Asociación Profesional (PCA) buscará la medalla de oro con la selección de Rusia sin la compañía de su eterno rival Anatoli Kárpov. En los pasillos, Kaspárov maniobrará para derrocar a su compatriota Kirsán lliumyínov, presidente de la Federación Internacional (FIDE). Éste cuenta con el apoyo de Kárpov, campeón de la FIDE.La Olimpiada, que se celebra cada dos años, es la gran fiesta d...

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El maximalismo de Gari Kaspárov se pondrá a prueba desde hoy en una doble vía durante la Olimpiada de ajedrez en Yeverán (Armenia), con más de 130 países participantes. Ante el tablero, el campeón del mundo de la Asociación Profesional (PCA) buscará la medalla de oro con la selección de Rusia sin la compañía de su eterno rival Anatoli Kárpov. En los pasillos, Kaspárov maniobrará para derrocar a su compatriota Kirsán lliumyínov, presidente de la Federación Internacional (FIDE). Éste cuenta con el apoyo de Kárpov, campeón de la FIDE.La Olimpiada, que se celebra cada dos años, es la gran fiesta del ajedrez; hombres y mujeres de todas las razas se juntan para competir en el tercer deporte más universal, tras el atletismo y el fútbol. Pero el interés de esta edición, la 32ª, está eclipsado por las elecciones a la presidencia de la FIDE, cuyo congreso se celebrará simultáneamente a la competición. El ambiente de los comicios refleja el cénit del caos y el cisma que sufre el ajedrez en los últimos tres años.

La situación puede compararse con una película de enredo. El multimillonario Iliumyínov, de 34 años, que también preside la República autónoma de Kalmikia (cerca de Chechenia), sustituyó hace un año a Florencio Campomanes gracias a un golpe de estado promovido por Kárpov cuando el filipino y Kaspárov estaban a punto de firmar un acuerdo de reunificación.

lliumyínov hizo frente con éxito a los dos problemas más graves que puede tener la FIDE: bancarrota y ausencia de campeón del mundo. Además de pagar de su bolsillo los gastos de una reunión de la directiva de la FIDE en Singapur, el nuevo presidente organizó en Kalmikia el duelo entre Kárpov y el conflictivo estadounidense Gata Kamski. Sus próximos objetivos eran enfrentar a Kárpov con Kaspárov y firmar un contrato de patrocinio por 50 millones de dólares (6.125 millones de pesetas) para diez años con una multinacional japonesa.

Sin embargo, lliumyínov decidió no presentarse a la relección en Yereván porque se sintió traicionado por algunos directivos. Éstos, que califican al ruso de "dictador de guante blanco" y de abrir "trigo sucio", promueven ahora la candidatura del brasileño Jaime Sunyé Neto, de cuya honradez no duda nadie. Pero Kárpov, que apoya como futuro presidente al francés Bachar Kouatly, replicó con extremo pragmatismo durante una conversación con EL PAÍS: "Sunyé Neto no es Pelé y carece de la capacidad de lliumyínov para lograr dinero". La intención de Kouatly, apoyado por el español Román Torán, es inequívoca: "Intentaré convencer a la Asamblea General de que rechace a los dos candidatos y pida la continuidad de Iliumyínov".

En el terreno deportivo, la selección española masculina tiene la ilusión de luchar por los diez primeros puestos tras la nacionalización de Alexéi Shírov, acompañado por Illescas, Magem, San Segundo, Izeta y David García. En la competición femenina, con Georgia y China como favoritas, España confía en la experiencia de Nieves García, Cuevas, Calceta y Vilar. Desde que la URSS se transformó en 15 repúblicas, las medallas están carísimas.

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