GENTE

BICICLETA PELIGROSA

Theo Thorskildsen, un joven noruego de 19 años, se llevó la sorpresa de su vida cuando acondicionaba una bicicleta adquirida en una subasta de la policía de Oslo, al encontrar en los caños del manillar unas bolsitas con un polvo blanco que resultó ser droga. Sin pérdida de tiempo y como medida de precaución, Theo informó del hallazgo al diario Verdens Gang antes de hacerlo a la policía. Allí contó que había estado con una amiga en una de las subastas de bicicletas robadas que no fueron reclamadas por sus dueños, y su amiga adquirió la bici con dinero que él le prestó, con la promesa...

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Theo Thorskildsen, un joven noruego de 19 años, se llevó la sorpresa de su vida cuando acondicionaba una bicicleta adquirida en una subasta de la policía de Oslo, al encontrar en los caños del manillar unas bolsitas con un polvo blanco que resultó ser droga. Sin pérdida de tiempo y como medida de precaución, Theo informó del hallazgo al diario Verdens Gang antes de hacerlo a la policía. Allí contó que había estado con una amiga en una de las subastas de bicicletas robadas que no fueron reclamadas por sus dueños, y su amiga adquirió la bici con dinero que él le prestó, con la promesa de que se la dejaría para un viaje a Amsterdam que él haría en el verano. Justo cuando se disponía a viajar se encontró con la sorpresa. "Me latió fuerte el corazón", declaró Theo al diario, "de sólo pensar que esto me pudo haber costado la cárcel, siendo totalmente inocente, ya que difícilmente la policía me hubiera creído". Depositado el sorprendente hallazgo en la policía, Theo emprendió su viaje a la capital holandesa un poco más ligero de equipaje-

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