Futbolista a cambio de cama y comida

El Marbella buscó jugadores a través de anuncios en la prensa

El Marbella evitó su desaparición en el último aliento. A última hora Jesús Gil, el alcalde la ciudad, avaló la deuda de 253 millones de pesetas que reclamaban los 26 jugadores que abandonaron el equipo. Y acto seguido se puso manos a la obra en la reconstrucción del nuevo equipo. Gil encontró pronto el entrenador, Félix Bardera, Felines, pero le faltaba formar la nueva plantilla. La solución fue publicar en dos periódicos deportivos un curioso anuncio: "Se necesitan jugadores para el Marbella".El secretario del club contabilizó ayer 340 llamadas telefónicas y faxes enviados por represe...

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El Marbella evitó su desaparición en el último aliento. A última hora Jesús Gil, el alcalde la ciudad, avaló la deuda de 253 millones de pesetas que reclamaban los 26 jugadores que abandonaron el equipo. Y acto seguido se puso manos a la obra en la reconstrucción del nuevo equipo. Gil encontró pronto el entrenador, Félix Bardera, Felines, pero le faltaba formar la nueva plantilla. La solución fue publicar en dos periódicos deportivos un curioso anuncio: "Se necesitan jugadores para el Marbella".El secretario del club contabilizó ayer 340 llamadas telefónicas y faxes enviados por representantes o futbolistas ofreciendo sus servicios. "Llamaron hasta de Portugal y Francia", corrobora Manuel Rodríguez, presidente del club, concejal de Marbella y encargado de escuchar las ofertas y comunicárselas a Felines.

El presidente quedó muy afectado por la llamada de un jugador que le propuso integrar el equipo a cambio de "cama y comida". Rodríguez achaca al caso Bosman el hecho de que numerosos futbolistas "de categoría" estén dispuestos a jugar en un equipo de Segunda B, que no tendrá más de 70 millones de pesetas de presupuesto: "Hay jugadores sin equipo como para hacer otra Liga, y más parados que albañiles".

A Felines no le hizo falta mucho tiempo. En un solo día reclutó a 16 jugadores, entre los que se encuentran Javi Rey, del Getafe, o Castillo y Guillenno, del Badajoz. Pero el fichaje más espectacular lo consiguió Gil: el defensa del Atlético Tomás Reñones, que tenía ofertas de dos equipos japoneses. El lateral gallego será el nuevo capitán del Marbella y asegura que se toma muy en serio el proyecto y que no viene a jugar "por hobby".

El entrenador, que tiene a prueba a tres futbolistas que respondieron al anuncio de prensa, se quedó sorprendido al descubrir "tantos jugadores sin trabajo". Felines repescó a sólo dos futbolistas que militaron en el Marbella la pasada temporada, Raudona y Esteban, y quiere que la plantilla no supere el número de 19 de los 25 jugadores permitidos (seis deben ser menores de 23 años). "Tenemos un abanico amplio, y hay plazo hasta enero por si necesitamos algún jugador más", afirma el entrenador, que está convencido de poder formar en pocos días un equipo competitivo.

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