Dos héroes tardíos

No son vidas paralelas, pero reflejan el carácter combativo de los dos héroes que han llevado a Alemania e Inglaterra hasta la semifinal. Uno es Matthias Sammer, líbero del equipo alemán; el otro, David Seaman, portero del Arsenal y de la selección inglesa. Ambos presentan una larga carrera y un reconocimiento tardío."Mi líbero es Sammer", declaró Vogts cuando realizó la convocatoria de su selección para la Eurocopa. La decisión del entrenador puso fin a la carrera internacional de Lothar Matthaus y abrió un fuerte debate en Alemania.

Sammer ha respondido con una participación decisiva ...

No son vidas paralelas, pero reflejan el carácter combativo de los dos héroes que han llevado a Alemania e Inglaterra hasta la semifinal. Uno es Matthias Sammer, líbero del equipo alemán; el otro, David Seaman, portero del Arsenal y de la selección inglesa. Ambos presentan una larga carrera y un reconocimiento tardío."Mi líbero es Sammer", declaró Vogts cuando realizó la convocatoria de su selección para la Eurocopa. La decisión del entrenador puso fin a la carrera internacional de Lothar Matthaus y abrió un fuerte debate en Alemania.

Sammer ha respondido con una participación decisiva en los triunfos de su selección en la Eurocopa. Lo ha hecho desde el puesto que, de alguna manera, inventó Beckenbauer. Su reconversión a la posición de escoba se ha producido en los últimos meses, después de pasar por casi todas las líneas.

Comenzó como delantero centro en el Dinamo de Dresde, donde alcanzó la internacionalidad con la selección de la antigua RDA. Fue capitán de la última selección de la Alemania Oriental, frente a Bélgica, en septiembre de 1990, y el primero del Este que participó con el equipo alemán reunificado, contra Suiza, dos meses después.

Sammer, de 28 años, ha tenido una vida trashumante. Dresde, Stuttgart, Inter de Milán y Borussia Dortmund. Con todos ganó algo y cada uno le sirvió para retrasar su puesto.

Ahora es líbero y lo interpreta como tal: un jugador que se maneja en la defensa, pero que penetra por sorpresa en las líneas rivales. De ahí sus dos goles.

David Seaman tiene 33 años y ha obtenido este mes la gloria negada el pasado año, cuando no pudo detener la célebre parábola de Nayim en la final de la Recopa. Tranquilo, tan sosegado que su mayor afición es la pesca, ha mantenido la calma en los momentos de mayor dificultad inglesa. Detuvo un penalti al escocés McAllister y al español Nadal. Dice que tiene en su poder el informe más completo de jugadores de Inglaterra.

Seaman estudia a los delanteros y luego visualiza las situaciones en sus días de pesca. Un hombre flemático que se ha hecho un puesto en el fútbol después de recibir la negativa del Leeds en su etapa juvenil. "Dedícate al cricket", le dijeron. No lo hizo y su país se lo agradece.