GENTE

MONJA KARATEKA

Chantal Desmarais, religiosa canadiense perteneciente a las Hermanas de la Caridad de Sainte-Marie, de Montreal, conjuga como nadie el refrán español de "a Dios rogando y con el mazo -dando", ya que, cuando no eleva sus preces al cielo, practica el kárate. Sor Chantal, de 32 años, es nada menos que cinturón negro de kárate, la máxima categoría dentro de ese milenario arte marcial, según relata el diario La Presse de Montreal. La monja, cuando no se ocupa de sus rezos ni de la catequesis de niños, enseña kárate a varios grupos de jóvenes. Asegura no haber tenido nunca que emplear sus...

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Chantal Desmarais, religiosa canadiense perteneciente a las Hermanas de la Caridad de Sainte-Marie, de Montreal, conjuga como nadie el refrán español de "a Dios rogando y con el mazo -dando", ya que, cuando no eleva sus preces al cielo, practica el kárate. Sor Chantal, de 32 años, es nada menos que cinturón negro de kárate, la máxima categoría dentro de ese milenario arte marcial, según relata el diario La Presse de Montreal. La monja, cuando no se ocupa de sus rezos ni de la catequesis de niños, enseña kárate a varios grupos de jóvenes. Asegura no haber tenido nunca que emplear sus conocimientos de autodefensa y confiesa que antes de seguir su vocación religiosa deseó incorporarse al Ejército. Finalmente, el funcionamiento del mundo militar, demasiado poco exigente para su gusto, la hizo desistir de su vocación castrense. También es instructora de hockey sobre hielo.-

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