El Bayern confía en el 'efecto Beckenbauer'

El Bayern Múnich, tras varios días agitados por el cese de su entrenador Otto Rehhagel, afronta esta noche (20.00, Antena 3), con un lleno total en el Estadio Olímpico de la capital de Baviera, el partido de ida de la final de la Copa de la UEFA con la esperanza puesta en que surta efecto la presencia, del presidente del club, Franz Beckenbauer, en el banquillo. El Girondins de Burdeos acude a Múnich con las bajas por sanción de dos de sus jugadores más importantes, el centrocampista Zidane y el delantero Dugarry, autor de dos goles en el 3-0 contra el Milan. Nota picante del partido de es...

El Bayern Múnich, tras varios días agitados por el cese de su entrenador Otto Rehhagel, afronta esta noche (20.00, Antena 3), con un lleno total en el Estadio Olímpico de la capital de Baviera, el partido de ida de la final de la Copa de la UEFA con la esperanza puesta en que surta efecto la presencia, del presidente del club, Franz Beckenbauer, en el banquillo. El Girondins de Burdeos acude a Múnich con las bajas por sanción de dos de sus jugadores más importantes, el centrocampista Zidane y el delantero Dugarry, autor de dos goles en el 3-0 contra el Milan. Nota picante del partido de esta noche, además de la reaparición de Beckenbauer en el banquillo, la pone el entrenador del Burdeos, Gernot Rohr, un alemán de 42 años que entre 1972 y 1974 jugó en el Bayern, aunque sólo como titular en seis partidos.Rohr no se deja asustar por el nombre del contrincante y llegó a declarar que "a quien conquistó la montaña del Milan no le puede asustar la colina del Bayern". El Burdeos ha sido la gran sorpresa de esta Copa de la UEFA. El equipo francés consiguió clasificarse para el torneo gracias a la veraniega copa Intertoto, en la que disputó nada menos que 18 partidos, y ahora paga quizás las consecuencias de tanto esfuerzo con un puesto 16 en la Liga francesa y la amenaza de descender. En la Copa de la UEFA el Burdeos llegó a la final tras superar en su campo el 2-0 en contra de Milán con un sensacional 3,70. Todo parece indicar que el equipo de Burdeos intentará esta noche colocar el autobús delante de la portería propia para evitar que la eliminatoria quede ya decidida e intentar dentro de dos semanas repetir contra el Bayern la hazaña de las semifinales contra el Milan.

El Bayern cuenta con todos sus efectivos, salvo el sancionado defensa Strunz, pero esta baja no es tan importante, porque la colección de futbolistas del Bayern resulta, en teoría, muy superior a la del equipo francés y su posible sustituto Hamann realizó en Barcelona un gran partido. El Bayern huele las mieles de una victoria en un torneo europeo, suerte que le ha sido vedada en los últimos 20 años, desde un 12 de mayo de - 1976. En aquella ocasión, en Glasgow, un Bayern en el que todavía corrían por la pradera monstruos del calibre de Beckenbauer, Maier, Hoeness, Müller o Rummenigge ganaron por 1 -0 precisamente a otro equipo francés, el Saint Etienne. Ahora el Bayern confía en que la presencia de Beckenbauer, presidente y entrenador a la vez, en el banquillo sirva de revulsivo y la buena estrella tradicional del Kaiser se contagie al equipo. El capitán Matthäus declaró que confía en que Beckenbauer dé al Bayern el impulso que no fue capaz de dar Rehhagel. El verdugo del Barcelona, Scholl, dice que Beckenabuer con su pico de oro debilita a los contrarios y fortalece al Bayern.

Alineaciones

Bayern Múnich: Kahn; Matthaeus; Babbel, Helmer; Hamann, Scholi, Sforza, Nerlinger, Ziege; Papin y Klinsmann.

Girondins Burdeos: Huard; Fischer o Fernández, Dogon, Friis-Hansen, Lizarazu; Groci, Lucas, Dutuel, Witschge, Bancarel y Tholot.

Árbitro: Serge Mámenthaler (Suiza).