FÚTBOL 36ª JORNADA DE LIGA

El Sporting tira el 'derby'

Sólo hubo 25 minutos de derby. Lo demás fue un juego de niños, con el Oviedo disfrutando con el juguete roto sportinguista. En ese minuto 25, la reclamación de un penalti sobre Bangó se convirtió en la perdición local. Dani Bouzas vio su segunda tarjeta por protestar a un linier y en la siguiente jugada Bango, víctima de un arrebato de ira, empeoré las cosas con una entrada sin sentido a Manel. Carmona Méndez, al aplicar el reglamento, se convirtió en el protagonista absoluto de un partido que, hasta entonces, respondía a los parámetros de la rivalidad: poco juego y mucha tensión. Como ...

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Sólo hubo 25 minutos de derby. Lo demás fue un juego de niños, con el Oviedo disfrutando con el juguete roto sportinguista. En ese minuto 25, la reclamación de un penalti sobre Bangó se convirtió en la perdición local. Dani Bouzas vio su segunda tarjeta por protestar a un linier y en la siguiente jugada Bango, víctima de un arrebato de ira, empeoré las cosas con una entrada sin sentido a Manel. Carmona Méndez, al aplicar el reglamento, se convirtió en el protagonista absoluto de un partido que, hasta entonces, respondía a los parámetros de la rivalidad: poco juego y mucha tensión. Como era de suponer, con 9 contra 11, y la caldera encendida, el fútbol salió por la ventana. Entre la desesperación mal contenida del Sporting y la parsimonia del Oviedo, lo del Molinóndio más para una crónica de sucesos que deportiva. El Oviedo estuvo tan displicente que sólo anotó un gol válido, para mayor escarnio gijonés de Carlos y en el descuento del primer tiempo. Pudieron ser bastantes más, pero entre la madera (dos veces), un fuera de juego a Carlos al final y Ablanedo, que paró hasta un penalti, el resultado se ajustó a los cánones más recientes de la rivalidad asturiana.

Durante el segundo tiempo, la actitud agresiva del Sporting estuvo a punto de provocar la suspensión del partido. Pero Carmona levantó la mano, olvidó su severidad anterior y perdonó la expulsión de al menos tres rojiblancos. A pesar del barullo, el Sporting tuvo el empate a mano. Pero falló Lediakhov.

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