Roa vuelve loco al Leganés

El Atlético, con un hombre menos, rentabiliza sus ocasiones

Roa volvió loco al Leganés B. Salió a 20 minutos del final, cuando el Atlético jugaba con 10, marcó y provocó un penalti. Su decisiva aportación sirve para que el Atlético prosiga su buena racha hacia los puestos de honor de la tabla.La victoria fue sorprendente. El Atlético B marcó sus dos goles en la recta final del encuentro, después de haberse dedicado a defender durante la mayor parte del partido. El Leganés B, con muy mala suerte, no consiguió traducir en gol ninguna de sus numerosas oportunidades. Los rojiblancos, en cambio, rentabilizaron las suyas al cien por cien.

El At...

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Roa volvió loco al Leganés B. Salió a 20 minutos del final, cuando el Atlético jugaba con 10, marcó y provocó un penalti. Su decisiva aportación sirve para que el Atlético prosiga su buena racha hacia los puestos de honor de la tabla.La victoria fue sorprendente. El Atlético B marcó sus dos goles en la recta final del encuentro, después de haberse dedicado a defender durante la mayor parte del partido. El Leganés B, con muy mala suerte, no consiguió traducir en gol ninguna de sus numerosas oportunidades. Los rojiblancos, en cambio, rentabilizaron las suyas al cien por cien.

El Atlético B no tuvo su día en lo que a juego se refiere. Sus jugadores no fueron capaces de salir con el balón controlado de medio campo para arriba. Pero en defensa estuvieron bastante más sólidos, especialmente su portero. La inevitable cesión de espacio les supuso a los rojiblancos tener que jugar en un territorio de apenas veinte metros.

Desde la salida al campo, el partido fue de dominio total del Leganés B ante un Atlético de Madrid que vino a no perder el partido. Durante muchos minutos, los 11 jugadores rojiblancos estuvieron encerrados en su área. El Leganés B tuvo ocasiones de marcar bastante claras, pero allí estaba Felipe, que lo paraba todo. El equipo pepinero fracasó en la labor rematadora: no es suficiente con realizar una presión agobiante. Hay que saber, además, acertar de cara a la portería contraria.

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