Entrevista:

"Donde hemos perdido más credibilidad es en la moral pública"

Raimon Obiols, de 55 años, es el primer secretario del PSC y responsable de relaciones internacional de la Ejecutiva Federal del PSOE. Ha sido el coordinador del manifiesto que los socialistas debaten hoy en la conferencia extraordinaria convocada para este fin de semana.Pregunta. El manifiesto recoge una fuerte autocrítica por reacción tardía del PSOE ante los escándalos. Toda la oposición pide que José Barrionuevo no figure en las listas electorales. ¿No cree que es una buena oportunidad para practicarlo.?

Respuesta. Nuestra posición deriva del convencimiento de la inoce...

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Raimon Obiols, de 55 años, es el primer secretario del PSC y responsable de relaciones internacional de la Ejecutiva Federal del PSOE. Ha sido el coordinador del manifiesto que los socialistas debaten hoy en la conferencia extraordinaria convocada para este fin de semana.Pregunta. El manifiesto recoge una fuerte autocrítica por reacción tardía del PSOE ante los escándalos. Toda la oposición pide que José Barrionuevo no figure en las listas electorales. ¿No cree que es una buena oportunidad para practicarlo.?

Respuesta. Nuestra posición deriva del convencimiento de la inocencia de Barrionuevo y de que el propio proceso judicial evoluciona de forma positiva,

P. El PSOE ha apostado por dejarlo todo en manos de la Justicia y eludir cualquier responsabilidad política por el caso GAL. ¿No le parece un error?

R. Las fronteras entre responsabilidades políticas y penales hay que definirlas en cada caso. No hay norma generales. Nuestra impresión en este caso es que, si no existe responsabilidad penal, no la hay política.

P. El manifiesto político del PSOE apenas habla sobre los GAL, y un dirigente vasco, Fernando Buesa, ha introducido una enmienda en la que pide el reconocimiento del "error político" por ello. ¿Qué opina?

R. No creo que el manifiesto eluda problemas graves. Admitimos críticamente nuestra actitud y reacción tardía ante los escándalos, pero estamos convencidos de que no hay base para hablar de responsabilidades políticas del PSOE en el caso GAL

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P. Su electorado, ¿rechaza más los escándalos o la reacción tardía ante ellos?

R. La reacción tardía, que en algunos casos es cierta y lo hemos reconocido. Hemos pasado una época casi agobiante. Pero estamos convencidos de que la situación gira en un sentido favorable a desdramatizar los problemas, requisito indispensable para afrontarlos caso por caso.

P. Pero Felipe González ha dicho que van a reciclarse los escándalos en la campaña.

R. Mi impresión es que no. Dije en su momento que había que establecer una relación causa-efecto entre la entrada en la cárcel de Mario Conde y Javier de la Rosa y la crisis político-mediática agobiante que vivíamos. Me cuesta pensar ahora que no haya una relación causa-efecto entre la distensión de la crisis político-mediática y las revelaciones sobre estos magnates.

P. Lo que llaman en el manifiesto "coalición de intereses contra las instituciones", ¿se limita a Conde y De la Rosa?

R. Hay aspectos no desvelados. Fui el primero que citó a De la Rosa y Conde en. marzo del año pasado. Los hechos me han dado, la razón, pero entonces fui atacado durísimamente. Un personaje de la derecha dijo que "esos infundios no interesan", sino la hora en que los pronuncié, porque yo estaba en avanzado estado etílico. Quiero evitar ataques de esa naturaleza.

P. ¿Qué explicarán a su electorado sobre los escándalos?

R. Que estamos haciendo lo posible para erradicarlos y que no es un problema exclusivo de un partido Afecta a todo aquel que asume responsabilidades. Proponemos un pacto entre partidos y una alianza entre el sector público y el privado para eliminarla.

P. ¿A qué atribuye más el desgaste socialista, a la corrupción o a algunas políticas durante largos años de gobierno?

R. Donde hemos perdido más credibilidad es en la moral pública. Debemos dar pruebas que nos permitan recuperarla. No obstante, la lucha contra la corrupción tiene a corto plazo un efecto no deseable: el tenia está permanentemente sobre la mesa, lo que puede llevar a pensar a un observador no enterado que estamos peor. Pero la situación está mejorando.

P. Juan Carlos Rodríguez Ibarra. dice que el crecimiento de España ofrece la paradoja de crear nuevos beneficiarios que ahora no votan al PSOE porque no les baja los impuestos.

R. Nadie cree a ningún político que dice que va a reducir los impuestos. Las vacilaciones de Aznar son significativas. Desde la izquierda se puede ofrecer el mantenimiento de unos niveles óptimos de protección sin un alimento de la presión fiscal.

P. PSOE y PP defienden. los criterios, de Maastricht. Comparten un acuerdo sobre las pensiones. ¿Hay diferencias entre izquierda y derecha?.

R. La izquierda quiere desarrollar los derechos sociales y la derecha quiere

hacer la cuadratura del círculo de mantener pensiones, y bajar impuestos. En la izquierda ay mejores gestores. No hay discusión entre González y Aznar. También hay una diferencia ideológica y cultural porque obedecen a tradiciones distintas. ".En la transición se echó un manto obre el pasado y debe desvelarse. Hay que mantener viva la memoria de nuestra historia. España ha tenido una de las derecha más crueles de Europa.

P. ¿Pero queda algo de esa. derecha histórica?

R. Hay fenómenos que tienen continuidad, aunque se manifiesten de forma distinta. Determinadas facetas del PP tienen connotaciones que enlazan con la derecha del pasado. Está la inexistencia de una extrema derecha en España, cuando tiene el 15% o 20% en Francia. ¿Dónde está en España? ¿No es un submarino que navega en el PP? Hay rasgos de dramatización, de falta de laicismo en el discurso del PP, y cuando aparece algún dirigente políticamente laico, como Ruiz-Gallardón, se le considera una excepción.

P. ¿No cree que es buena la alternancia en España?

R. Los ciclos en política son aleatorios. Es mejor que continúe la socialdemocracia. La otra alternativa es la del PP, con lo que implica, y lo digo sin dramatismos. Hay que. elegir entre el PSOE y un PP dirigido por Aznar que plantea dudas sobre su capacidad de gobierno.

P. Si Aznar consigue una mayoría minoritaria y tiene dificultades para formar gobierno con los nacionalistas. ¿Lo formarían ustedes?

R. El Partido Popular ha cometido el error de pelearse con el resto de los partidos. La hostilidad del PNV y de CiU está ahí. Aznar tendría dificultades para articular un acuerdo. No es el caso del PSOE, y la democracia es conseguir una mayoría y tratar de que haya un Gobierno estable.

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