Las últimas lluvias no han logrado mitigar los perjuicios de la sequía

Las precipitaciones caídas en la mitad sur peninsular la semana pasada apenas han paliado el impacto de la larga sequía, aunque sí han servido para devolver al suelo parte de la humedad perdida por el calor. Los embalses secos han recuperado 334 hectómeros cúbicos, una cantidad "decepcionante para esta época del año", según Enrique Noain, presidente de la Confederación, Hidrográfica del Tajo. El escaso volumen de agua que ha entrado a los embalses permite no aumentar el régimen de restricciones en Murcia y Andalucía.El frente lluvioso que ha barrido el occidente peninsular los días 11, 12 y 13...

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Las precipitaciones caídas en la mitad sur peninsular la semana pasada apenas han paliado el impacto de la larga sequía, aunque sí han servido para devolver al suelo parte de la humedad perdida por el calor. Los embalses secos han recuperado 334 hectómeros cúbicos, una cantidad "decepcionante para esta época del año", según Enrique Noain, presidente de la Confederación, Hidrográfica del Tajo. El escaso volumen de agua que ha entrado a los embalses permite no aumentar el régimen de restricciones en Murcia y Andalucía.El frente lluvioso que ha barrido el occidente peninsular los días 11, 12 y 13 de la semana pasada se ha disipado como una tormenta fugaz. En las serranías de Huelva y Sevilla y Sierra Morena han llegado a padecer inundaciones por la fuerte intensidad de la lluvia en periodos muy breves de tiempo. Los observatorios de Sevilla y Córdoba llegaron a medir máximos de 72 milímetros por metro cuadrado, unas cantidades no muy relevantes, aunque muy bien recibidas por quienes no veían la lluvia desde hacia años, como en la zona norte de la provincia de Córdoba. Hay poblaciones donde sólo disponen de agua los días alternos y con un horario muy restringido, como Los Pedroches.

Los embalses más beneficiados por la lluvia' y escorrentías son los situados en los tramos bajos de los ríos que vierten al Atlántico. Los del Tajo, Guadiana y Guadalquivir han recibido en la última semana alrededor de 334 hectómetros cúbicos. Pero las cuencas del Segura y Sur que se mantienen en su penuria; con un 8% de sus reservas la primera y. un 11 % la segunda.

Desembalses

La propia cuenca del Tajo, que surca la zona centro, constituye un paradigma de lo sucedido. Mientras los embalses que nutren al trasvase Tajo-Segura en su cabecera han visto pasar de largo el frente lluvioso, los situados a las faldas de la Sierra de Gredos (el Jerte) han tenido que soltar parte del agua almacenada para dejar hueco a futuras lluvias."Bienvenidas sean éstas, pero estoy decepcionado", afirma Enrique Noain, presidente de esta confederación hidrográfica. Las reservas del Tajo sólo se han incrementado un 1% -110 hectómetros cúbicos-, localizado exclusivamente en los grandes embalses de Cáceres, como el de Alcántara (47 hectómetros), Gabriel y Galán (19), Rosarito (17) y Valdecañas (16), próximos todos ellos a la frontera portuguesa y de uso preferentemente hidroeléctrico.

Noain negocia en estos días los detalles de un acuerdo con Castilla-La Mancha para tender una conducción desde los embalses de San Juan y Picadas para atender los abastecimientos de Toledo y varías comarcas manchegas. Divergencias entre las consejerías autonómicas de Obras Públicas y de Agricultura por ubicar la toma de esta conducción están retrasando la infraestructura necesarias.

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