La senegalesa Germaine Acogny muestra hoy su 'Despertar'

Germaine Acogny, bailarina y coreógrafa senegalesa de 51 años, realiza un trabajo en el que mezcla las danzas tradicionales del norte de África con la técnica del ballet contemporáneo occidental, el ballet clásico o las danzas hindúes. Hoy, Acogny presenta dentro, de la progiramación del Festival de Otoño Ye'Ou (El despertar).

Acogny tan sólo cuenta para su Despertar con la colaboración del percusionista Arona N'Diaye (hijo del maestro del tambor Dou Dou N'Diaye), con la iluminación de unas sencillas luces y el vuelo de un amplio vestido blanco. Se trata de una coreografía en la ...

Germaine Acogny, bailarina y coreógrafa senegalesa de 51 años, realiza un trabajo en el que mezcla las danzas tradicionales del norte de África con la técnica del ballet contemporáneo occidental, el ballet clásico o las danzas hindúes. Hoy, Acogny presenta dentro, de la progiramación del Festival de Otoño Ye'Ou (El despertar).

Acogny tan sólo cuenta para su Despertar con la colaboración del percusionista Arona N'Diaye (hijo del maestro del tambor Dou Dou N'Diaye), con la iluminación de unas sencillas luces y el vuelo de un amplio vestido blanco. Se trata de una coreografía en la que a lo largo de cinco cuadros representa el éxtasis del cuerpo en unión con la naturaleza, el agua y el fuego. Todo eso al ritmo que marca el ritual de los tambores.Germaine Acogny estudió en París educación física, gimnasia y (lanza. En los años setenta dirigió en Senegal la escuela Mudra Afrique. El coreógrafo Maurice Bejart la considera su doble africano: ambos tienen en común un origen senegalés y ambos parten de la danza clásica para enriquecerla con ritmos africanos y asiáticos. En sus espectáculos suele bailar ella sola.

Ésta es la, primera vez que Acogny viene a España. Y lo hará sólo por un día, porque le espera una gran campana en Brasil: espectáculos y labores pedagógicas a lo largo y ancho de, este país durante todo un mes. Su centro de operaciones está en Toulouse, aunque se reparte también entre Senegal y Dakar.

Esta bailarina senegalesa es también profesora en algunos, de los centros más importantes de danza. "Yo logro que todo el mundo baile, incluso gente que no ha bailado nunca. Les enseño a que encuentren la alegría de vivir reconociendo su propio cuerpo", dice Acogny, nieta de una sacerdotisa de la comunidad religiosa Yao Orisa. Precisamente, Acogny se considera la reencarnación, de esta antepasada. Y para designar las partes del cuerpo la bailarina utiliza su propio código: al pecho, le llama sol; al trasero, luna, y la zona sexual equivale a las estrellas.

Ye'Ou, en el Teatro Albéniz (Paz, 11, metro Sol). Hoy, viernes, a las 23.00. Precio: 1.800 y 2.200 pesetas.