Dedicado a Alberto Puig

Los pilotos son gente diferente. Tipos a veces excéntricos y siempre especiales, pero hechos de buena pasta. Y sobre todo tremendamente generosos. Àlex Crivillé volvió a demostrarlo ayer en Inglaterra. Su éxito en el Gran Premio de Gran Bretaña no fue para él. Prefirió ofrecer toda la alegría por el tercer lugar en la Carrera de 500 a un rival, a Alberto Puig, al compañero lesionado. El nen de Seva se esforzó por sí mismo, por superarse en un circuito tradicionalmente nefasto para sus intereses, pero sobre todo para llevar algo de esperanza a una habitación del Instituto Dexeus donde Pu...

Los pilotos son gente diferente. Tipos a veces excéntricos y siempre especiales, pero hechos de buena pasta. Y sobre todo tremendamente generosos. Àlex Crivillé volvió a demostrarlo ayer en Inglaterra. Su éxito en el Gran Premio de Gran Bretaña no fue para él. Prefirió ofrecer toda la alegría por el tercer lugar en la Carrera de 500 a un rival, a Alberto Puig, al compañero lesionado. El nen de Seva se esforzó por sí mismo, por superarse en un circuito tradicionalmente nefasto para sus intereses, pero sobre todo para llevar algo de esperanza a una habitación del Instituto Dexeus donde Puig parece empezar a ver la luz al final del túnel. Emilio Alzamora, con otra tercera posición en 125, se sumó a la dedicatoria."Al pasar la meta me he acordado de Alberto", reconoció Crivillé. "Este buen resultado se lo dedico a él. Espero que se recupere pronto y vuelva a estar con nosotros, aunque sea para intentar ganarme". Según los médicos que atienden a Puig, esa ilusión es cada vez más posible.

Ayer Crivillé no necesité el estímulo de batir a Puig para realizar una buena carrera. Hasta ayer, Donington era un circuito maldito para él. Sin embargo, no consiguió participar en1a lucha por el triunfo, protagonizada por los dos australianos que se disputan el título mundial, Mick Doohan (Honda) y Daryl Beattie (Suzuki).

Doohan abre hueco

Este último fue el que salió mejor, pero el actual campeón no tardó en alcanzarlo y superarlo. Después no hubo más historia. Doohan mantuvo una ventaja cómoda y ganó por primera vez en este circuito. Fue su sexta victoria de la temporada y le permite abrir un hueco de 15 puntos rerspecto a su compatriota al frente del Mundial.La ausencia de Puig en Donington fue notable, pero su Honda estuvo allí, pilotada ahora por Carlos Checa. El joven discípulo de Sito Pons superó las expectativas en su primer fin de semana en la categoría reina, aunque no logré terminar la carrera. Después de una salida brillante, que le llevó hasta el quinto lugar tras adelantar a pilotos más expertos, la maniobra de otro piloto lo llevó por los suelos. Sin embargo, Checa apuntó que puede hacerlo bien en 500. El, tercer español del pelotón, el privado Juan Bautista Borja (Roe Yamaha), se clasificó octavo y es décimo en el campeonato.

En 125, Emilio Alzamora (Honda) obtuvo el segundo éxito español del día. Y su presencia en el podio de Donington reivindicó el buen papel de la representación española este año. El joven piloto de Lleida estuvo en un cajón del Mundial por segunda vez en su vida tras acabar tercero. "El resultado es bueno, sobre todo después de la mala racha de las últimas carreras", explicó, "pero esperaba estar con los de delante".

Su compatriota Haruchika Aoki (Honda), líder destacado del Mundial de 125, sufrió la primera caída de la temporada, pero mantiene su absoluta primacía -49 puntos de ventaja sobre Perugini-. Y entre los españoles, además de Alzamora, puntuaron Jorge Martínez, Aspar (Yamaha), muy recuperado física y mecánicamente, y también Herri Torrontegui (Honda). Fueron octavo y 12º, respectivamente.

En 250, el italiano Max Biaggi (Aprilia) se sobrepuso al dolor de la mano tras su caída del sábado y demostró que es el. gran favorito para renovar el título. Entre los españoles del cuarto de litro, el mejor fue Luis D'Antín (Honda), que se clasificó 11º.