"Sólo he recibido sugerencias de mi sobrino, que es del Madrid"

Es, con 37 años, el entrenador más joven de la era Gil. Hoy debuta en partido oficial.

Pregunta. ¿Quién es Carlos Sánchez Aguiar?



Respuesta. En el fútbol, nadie todavía. Alguien que disfruta con lo que hace y que desarrolla su trabajo con la mayor ilusión.



P. ¿Le han sugerido alguna alineación ante el Zaragoza?



R. La única sugerencia que he recibido hasta ahora ha sido la de mi sobrino, que, por cierto, es del Madrid. Y se aproxima bastante a mis intenciones.



P. ¿Usted cree que los jugadores l...

Es, con 37 años, el entrenador más joven de la era Gil. Hoy debuta en partido oficial.

Pregunta. ¿Quién es Carlos Sánchez Aguiar?

Respuesta. En el fútbol, nadie todavía. Alguien que disfruta con lo que hace y que desarrolla su trabajo con la mayor ilusión.

P. ¿Le han sugerido alguna alineación ante el Zaragoza?

R. La única sugerencia que he recibido hasta ahora ha sido la de mi sobrino, que, por cierto, es del Madrid. Y se aproxima bastante a mis intenciones.

P. ¿Usted cree que los jugadores le van a hacer caso?

R. Vamos por el camino del sentido común y del consenso. Todos nos tenemos que hacer un poquito de caso. Perseguimos lo mismo. No se trata de obedecer órdenes raras, porque no voy a tratar de inventar nada. Tampoco me tomo esta aventura como un ejercicio de autoridad, No se trata de su opinión contra la mía. Es la misma.

P. ¿No le asusta convertirse en un juguete de Gil? El 29.

R. No reparo en ese tipo de estadísticas. Y en vez de considerarme un juguete, prefiero pensar que soy útil al club.

P. ¿Qué gana o pierde aceptando este reto?

R. No lo sé. Sencillamente, tenía que aceptarlo. El tiempo hablará, pero lo normal es que no pase nada. El 18 de junio volveré a mi labor de siempre.

P. ¿Es consciente de que una derrota le puede costar inmediatamente el cargo?

R. No pienso más allá de este partido. Estoy exclusivamente concentrado en que el Atlético sume los dos puntos. No he pensado en lo que pueda pasar después. Tampoco está en mi mano.

P. Siempre soñaría una cosa así: entrenar al Atlético.

R. No soy tan iluso para creerme entrenador del Atlético como el final de un sueño. Yo sé que esto es una emergencia y no me precipito en extraer conclusiones de este tipo. Primero tengo que quemar las etapas lógicas en la transición hacia el entrenador que quiero llegar a ser.