La plantilla del Atlético dicta la 'ley del silencio'

La plantilla del Atlético se autoimpuso ayer una ley del silencio. Ningún futbolista podrá hacer declaraciones hasta que el equipo salga de la situación crítica por la que pasa. Tomás, el capitán, ejercerá como portavoz exclusivo. Hasta nueve, orden sólo él podrá hablar con los medios de comunicación.El principal motivo de la decisión, adoptada unánimemente por toda la plantilla en una reunión de 45 minutos, es " buscar esa tranquilidad que el equipo necesita para centrarse", según explicó Tomás. "También", añadió el portavoz, "aunar criterios. Que no se den tantas versiones sobre los últimos ...

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La plantilla del Atlético se autoimpuso ayer una ley del silencio. Ningún futbolista podrá hacer declaraciones hasta que el equipo salga de la situación crítica por la que pasa. Tomás, el capitán, ejercerá como portavoz exclusivo. Hasta nueve, orden sólo él podrá hablar con los medios de comunicación.El principal motivo de la decisión, adoptada unánimemente por toda la plantilla en una reunión de 45 minutos, es " buscar esa tranquilidad que el equipo necesita para centrarse", según explicó Tomás. "También", añadió el portavoz, "aunar criterios. Que no se den tantas versiones sobre los últimos acontecimientos que estamos viviendo y que pueden llevar a equivocos".

Jorge D'Alessandro, el entrenador, que sí podrá realizar declaraciones, definió el acuerdo de la plantilla "como una llamada a la serenidad". "Es bueno", añadió, "para cerrar filas".

Otra de las medidas adoptadas por el Atlético para salir del pozo en el que se encuentra es realizar una concentración durante tres días en Los Ángeles de San Rafael.

El acta

Mientras tanto, el acta del partido Atlético-Sevilla sirve para prolongar la polémica. "Vaya fallo", comentó el árbitro Rubio Valdivieso mientras abandonaba en un coche de la Policía el campo del Calderón tras dirigir el pasado domingo el Atlético-Sevilla (2-2). El colegiado vallisoletano acababa de leer en el acta: "El número 2 del Atlético [Tomás] fue expulsado por dar dos patadas a un contrario por detrás en la disputa del balón". El árbitro recordó que expulsó a Tomás por agarrar del pelo al jugador del Sevilla Suker.

"Fue un error burocrático", explicó ayer Rubio Valdivieso, "y, al disponer de 24 horas para rectificar las actas, hoy [por ayer] he enviado la corrección por fax".

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