La UEFA elabora un informe sobre el empleo de dos árbitros por encuentro

La Comisión de arbitraje de la UEFA, que preside el italiano Paolo Casarini, ha sido encargada de elaborar un estudio sobre la posibilidad de utilizar dos árbitros por partido. La propuesta ha sido presentada por la Federación de Noruega al considerar que esa fórmula mejorará la labor arbitral. La Federación Española, según un portavoz de la misma, contempla mas inconvenientes que ventajas. En el caso de que se apoye este sistema, debe ser planteado a la FIFA y aprobado por la International Board, el organismo internacional encargado de las reglas de juego.

"Más vale que se equivoqu...

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La Comisión de arbitraje de la UEFA, que preside el italiano Paolo Casarini, ha sido encargada de elaborar un estudio sobre la posibilidad de utilizar dos árbitros por partido. La propuesta ha sido presentada por la Federación de Noruega al considerar que esa fórmula mejorará la labor arbitral. La Federación Española, según un portavoz de la misma, contempla mas inconvenientes que ventajas. En el caso de que se apoye este sistema, debe ser planteado a la FIFA y aprobado por la International Board, el organismo internacional encargado de las reglas de juego.

"Más vale que se equivoque uno [por un árbitro] que dos". Esta sugerencia, que ya hace algunos anos lanzó el austríaco Heinz Gero, cuando presidió la Comisión de Arbitraje de la UEFA, ha sido recordada ahora por un alto cargo de la Federación Española de Fútbol al tener conocimiento de la propuesta presentada por la noruega. Según la sugerencia de la Federación noruega, un árbitro se limitaría a juzgar las incidencias de una mitad del terreno de juego, y el segundo, de la otra mitad.La UEFA trató este asunto el pasado viernes, en la reunión que su comisión ejecutiva celebró en Roma. Hasta el momento, según fuentes de la Federación, se ha limitado a sondear a las federaciones afiliadas. "Ha pedido opiniones y sugerencias que se unirán al informe encargado al italiano Casarin. Si llega a prosperar la propuesta, para ponerse en práctica requiere primero ser apoyada por la FIFA (Federación Internacional de Fútbol Asociación), que, a su vez, ha de trasladarla a la Internacional Board, a la que corresponde la decisión definitiva", añadieron dichas fuentes.

La Federación, aunque sólo ha estudiado el asunto de manera informal, considera que la nueva fórmula origina más inconvenientes que ventajas. "En realidad, se trataría de emplear un árbitro más. Ahora, cada partido cuenta con un árbitro principal, dos jueces de línea, y un cuarto colegiado, encargado de colaborar con el primero de ellos", señaló un portavoz federativo. "De esa forma", añadió, "se encarece el arbitraje". En la presente temporada, los 380 partidos de Liga suponen 450 millones de pesetas en derechos de arbitrajes, abonados por la Liga Profesional.

"La actuación de dos árbitros en un mismo partido", comentaron fuentes federativas, "posibilita la discrepancias de criterios sobre incidencias similares. Esta situación complicaría aún más la labor arbitral. Este es el mayor peligro que podría encontrar ese sistema".

También se ha hecho hincapié en la que los especialistas en temas arbítrales denominan la "zona gris", la que establece la línea divisoria de los dos campos, la línea central. "¿Qué pasaría si una incidencia del juego se produce en esa zona? ¿A qué árbitro le correspondería decidir?. Esta es precisamente una de las cuestiones polémicas que primero surgieron en un debate inicial. Habría que nombrar "jefe" a uno de los árbitros. Las suspicacias no serían entonces extrañas. Además, en encuentros internacionales, ¿los dos colegiados deben ser de la misma nacionalidad o de países diferentes? El asunto está en pañales". "No veo ventajas", añade Victoriano Sánchez Arminio, presidente de los árbitros españoles, "en el fútbol está todo inventado".

Las tensas relaciones que mantienen en la actualidad la FIFA y la UEFA tampoco se consideran el clima más propicio para dar esperanzas a la fórmula propuesta por la federacion noruega.

Y uno de los capítulos del enfrentamiento entre ambas organizaciones es precisamente la cuestión arbitral. La FIFA destituyó hace un par de meses al italiano Paolo Casarin como miembro de su comisión de árbitros, al igual que al belga Alexis Ponet.

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