El dueño del Marbella se nombra entrenador del equipo

El serbio Slodoban Petrovic, dueño y presidente del Atlético Marbella, decidió este fin de semana asumir también las funciones de entrenador y dirigir desde el palco las tácticas de su equipo. La imposición de la alineación del británico Andy Gray al técnico Antonio Montero Nene, supuso la dimisión del entrenador malagueño que se sentó sólo ocho veces en el banquillo."Me marcho por ética profesional", repetía Montero el pasado domingo, en el último partido que dirigió al Atlético Marbella. La imposición de la inclusión de Gray en el equipo y de otros dos jugadores, con los que ya contab...

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El serbio Slodoban Petrovic, dueño y presidente del Atlético Marbella, decidió este fin de semana asumir también las funciones de entrenador y dirigir desde el palco las tácticas de su equipo. La imposición de la alineación del británico Andy Gray al técnico Antonio Montero Nene, supuso la dimisión del entrenador malagueño que se sentó sólo ocho veces en el banquillo."Me marcho por ética profesional", repetía Montero el pasado domingo, en el último partido que dirigió al Atlético Marbella. La imposición de la inclusión de Gray en el equipo y de otros dos jugadores, con los que ya contaba el técnico, colmó la paciencia de Montero. "Lo voy a pasar muy mal, alejado del fútbol", admitía ayer Montero.

Hasta ayer los jugadores no habían cobrado las mensualidades de septiembre y de octubre, y es que el excéntrico presidente, que pasa la mitad de sus días en un yate anclado en Puerto Banús, utiliza la táctica del premio y el castigo para motivar a la plantilla. "Antes del miércoles cobrarán septiembre, y el mes de octubre, si ganan [el día 20] en Extremadura", señaló ayer un portavoz del club.

Petrovic, que vive enzarzado en discusiones con el alcalde Jesús Gil -a quien compró el equipo por 113 millones de pesetas- por las deudas que mantiene el club con la Liga profesional, requirió después del partido la presencia de los periodistas para hacer entrega a Lukic, máximo goleador de Segunda División, las llaves de un Lamborghini, valorado en 20 millones.

Montero consiguió con el Marbella 10 de los 16 puntos disputados en su etapa de entrenador, desde la tercer jornada cuando fue reclamado para sustituir al cesado Secularac.

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