Valeri Sálov: "Gari Kaspárov me veta"

El 6º ajedrecista del mundo vive en España y quiere ser español

Valeri Sálov cambió la grandiosidad de San Petersburgo por el aire puro de Valdemaqueda (Madrid), que ha contribuído a solucionar sus problemas de salud. Aspira al título de Anatoli Kárpov, campeón de la Federación Internacional (FIDE), se siente vetado por Gari Kaspárov, campeón de la Asociación Profesional (PCA), y encabeza una rebelión contra los privilegios de ambos. A los 30 años, el 6º ajedrecista del mundo acaba de ganar el torneo de Buenos Aires, donde venció dos veces a Kárpov, y quiere ser español.Sálov, que sólo ha perdido una partida de las últimas 36 disputadas (ante el yugoslavo ...

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Valeri Sálov cambió la grandiosidad de San Petersburgo por el aire puro de Valdemaqueda (Madrid), que ha contribuído a solucionar sus problemas de salud. Aspira al título de Anatoli Kárpov, campeón de la Federación Internacional (FIDE), se siente vetado por Gari Kaspárov, campeón de la Asociación Profesional (PCA), y encabeza una rebelión contra los privilegios de ambos. A los 30 años, el 6º ajedrecista del mundo acaba de ganar el torneo de Buenos Aires, donde venció dos veces a Kárpov, y quiere ser español.Sálov, que sólo ha perdido una partida de las últimas 36 disputadas (ante el yugoslavo Ljubomir Ljubójevic), reconoce que es el primer sorprendido por su formidable resultado en Argentina: "No pude descansar tras mi victoria en Tilburg [Holanda], que fue un torneo agotador. En Buenos Aires todo estaba en mi contra; no me gustan las grandes ciudades ni los grandes hoteles. Además, era obligatorio comenzar las partidas con el peón de rey, lo que yo no hago nunca".

El torneo se disputó a doble vuelta entre ocho participantes. Los otros cinco son jóvenes estrellas de élite: el indio Anand, la húngara Polgar, el ucranio Ivanchuk, el estadounidense Kamski y el letón Shírov. Sálov, admite que está en su mejor momento hasta ahora, pero ve el futuro con cierto escepticismo: "Estoy vetado por Kaspárov y por la PCA. Así no es fácil progresar".

Sálov es uno de los pocos que se han atrevido a criticar públicamente a Kaspárov, al que acusa de "imponer una dictadura sobre los torneos de la PCA" y añade: "Él decide quién juega y quién no. Por lo tantó, yo seré vetado a pesar de que Andrew Page [británico, apoderado de Kaspárov] afirmó lo contrario en una carta de réplica, cuando especuló con mucho cinimo sobre mi "estado mental", diciendo que el señor Kaspárov es una persona buena, grata, justa y excelente".

Este madrileño adoptivo es el líder de la llamada tercera vía, una corriente de opinión cada vez más extendida entre los jugadores de élite. Las principales quejas se refieren a la enorme diferencia (más de 200 millones de pesetas en el ciclo de la PCA) entre los premios de los Campeonatos del Mundo y los de las fases previas. Sálov propone que se reunifique el título mundial, que éste se dispute cada año, que Kaspárov y Kárpov jueguen las fases previas y que el dinero esté más repartido.

Su casa en la sierra madrileña ha contribuído a solucionar los problemas de salud que tanto han influído en su carrera. Por ejemplo, superó a Kaspárov y a Kárpov en el torneo de Amsterdam, en 1991, pero sus resultados posteriores no estuvieron a la misma altura. "Practico el ciclismo por los alrededores, intentando emular a Miguel Induráin, que es mi ídolo; nació en 1964, como yo", afirma Sálov, en un español casi perfecto. Pero aún tiene dos puntos débiles, la resistencia física y la preparación de las aperturas: "Tendré que luchar contra esos defectos cuando juegue con Kamski en las semifinales de la FIDE".

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