Crítica:

La leyenda del santo bebedor

23.00 / La 2La leggenda del Santo bevittore. Italia, 1988 (122 minutos). Dirección y guión: Ermanno Olmi. Fotografía: Dante Spinotti. Música: Igor Stravinski. Intérpretes: Rutger Hauer, Anthony Quayle, Sandrine Dumas, Dominique Pinon, Sophie Segalen.Basada en un cuento corto y místico de Joseph Roth, protagonizado por un vagabundo que busca la redención a través de un desesperado viaje hacia la iglesia de Sainte Marie de Batignolles, la cinta se alzó con el León de Oro del Festival ¿e Venecia. Es un relato amargo, cargado de un mensaje religioso que Ermanno Olmi no desaprovecha e...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

23.00 / La 2La leggenda del Santo bevittore. Italia, 1988 (122 minutos). Dirección y guión: Ermanno Olmi. Fotografía: Dante Spinotti. Música: Igor Stravinski. Intérpretes: Rutger Hauer, Anthony Quayle, Sandrine Dumas, Dominique Pinon, Sophie Segalen.Basada en un cuento corto y místico de Joseph Roth, protagonizado por un vagabundo que busca la redención a través de un desesperado viaje hacia la iglesia de Sainte Marie de Batignolles, la cinta se alzó con el León de Oro del Festival ¿e Venecia. Es un relato amargo, cargado de un mensaje religioso que Ermanno Olmi no desaprovecha en absoluto. El actor holandés Rutger Hauer (Blade runner), envejecido y gordo, da vida a este hombre errante que parece condenado a no llevar a cabo la misión encomendada por un misterioso caballero: depositar un dinero para el culto de Santa Teresa de Lisieux. Su viaje está trufado de personajes marginales, una vieja amante, apariciones y delirios fruto de su total dependencia al alcohol. Una película sensible, triste, de hermosa factura.

Archivado En