Un millar de artistas baten un récord musical en Granada

Luis Cobos, presidente de la Unión de Artistas, Intérpretes y Ejecutantes (AIE), clausuró en la medianoche del sábado el concierto más largo de la historia, que comenzó el viernes día 15 y se celebró en la localidad granadina de Armilla. Éxito musical, pero fracaso economico ha sido su resultado.Granada, pues, cuenta, desde la madrugada del pasado sábado, con el récord mundial de música ininterrumpida después de que más de 200 grupos, casi un millar de músicos y artistas, durante ocho días, interpretaran 202 horas de música sin pausa.

El récord Guinnes fue alcanzado a las 24.00 del ...

Luis Cobos, presidente de la Unión de Artistas, Intérpretes y Ejecutantes (AIE), clausuró en la medianoche del sábado el concierto más largo de la historia, que comenzó el viernes día 15 y se celebró en la localidad granadina de Armilla. Éxito musical, pero fracaso economico ha sido su resultado.Granada, pues, cuenta, desde la madrugada del pasado sábado, con el récord mundial de música ininterrumpida después de que más de 200 grupos, casi un millar de músicos y artistas, durante ocho días, interpretaran 202 horas de música sin pausa.

El récord Guinnes fue alcanzado a las 24.00 del sábado, con la actuación del cantaor Enrique Morente. Durante los ocho días anteriores, artistas de todas las condiciones y estilos, desde Miguel Ríos a Lagartija Nick, Carlos Cano o Los Ángeles, así como Karina, Mariquilla o Paco Cortés, entre otros muchos fueron desfilando día y noche por el escenario de una nave situada en el complejo de Ifagra, en la localidad de Armilla. La prueba estuvo a punto de ser cancelada en varías ocasiones por los avisos del Ayuntamiento a la Asociación de Músicos de Granada de interrumpir la música si ésta alcanzaba niveles de volumen que pudieran alterar el descanso de los vecinos.

Artistas como Enrique Morente, Jeanette, Micki, Lorenzo Santamaría o Tony Ronald colaboraron gratuitamente, al igual que el resto de los músicos, para hacer posible el acontecimiento. El éxito de los organizadores contrasta, sin embargo, con el fracaso económico, ya que la escasa asistencia de público ha provocado unas pérdidas que, según algunas fuentes, rondan los seis millones de pesetas. La finalidad de la asociación de músicos organizadora del macroconcierto era construir con los beneficios obtenidos una casa del músico con pequeñas salas de actuaciones y locales de ensayos. Las pérdidas sufridas harán inviable el anhelado proyecto.-