MENUDA CUESTA.
Dice la leyenda que en algún lugar de la pendiente más bella de Madrid vivió tapiada muchos años la Virgen de la Almudena, cuando por la ciudad paseaban los moros. La cuesta de la Vega es hoy un mirador tendido desde la montaña de palacio, cuyas curvas recoletas bajan hacia el río. Y un rincón escarpado por donde a veces trepan los montañeros del asfalto. ...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
Dice la leyenda que en algún lugar de la pendiente más bella de Madrid vivió tapiada muchos años la Virgen de la Almudena, cuando por la ciudad paseaban los moros. La cuesta de la Vega es hoy un mirador tendido desde la montaña de palacio, cuyas curvas recoletas bajan hacia el río. Y un rincón escarpado por donde a veces trepan los montañeros del asfalto.