Los sindicatos británicos amenazan con una huelga de funcionarios

El Congreso de los Sindicatos británicos (TUC) concluyó ayer su conferencia anual lanzando una advertencia al Gobierno conservador sobre el riesgo real de una huelga nacional. Tras asegurar que un "agitado descontento está creciendo" entre los funcionarios británicos, Alan Jinkinson, presidente del Comité de Servicios Públicos del TUC, reconoció que la huelga podría extenderse por todo el país.Con esta advertencia, el TUC respondió ayer a las declaraciones del ministro de Hacienda, Kenneth Clarke, quien el día anterior defendió una congelación salarial de los trabajadores del sector públic...

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El Congreso de los Sindicatos británicos (TUC) concluyó ayer su conferencia anual lanzando una advertencia al Gobierno conservador sobre el riesgo real de una huelga nacional. Tras asegurar que un "agitado descontento está creciendo" entre los funcionarios británicos, Alan Jinkinson, presidente del Comité de Servicios Públicos del TUC, reconoció que la huelga podría extenderse por todo el país.Con esta advertencia, el TUC respondió ayer a las declaraciones del ministro de Hacienda, Kenneth Clarke, quien el día anterior defendió una congelación salarial de los trabajadores del sector público. La medida repercutirá en un total de 5 millones de funcionarios, grupo que ya este año se vió obligado a aceptar un incremento salarial del 1,5% (ligeramente por debajo de la tasa de inflación).

Según Clarke, la contención de los salarios puede prolongarse "durante varios años", porque, como explicó el jueves a los delegados escoceses de la patronal británica, "tenemos que acostumbrarnos al clima en el que el Reino Unido tiene ahora control sobre la inflación".

Los responsables de la asociación de sindicatos insistieron ayer, por el contrario, que "los funcionarios están pagando por la ineptitud del Gobierno en el manejo de la economía". Y, por su parte, el responsable de Hacienda del Partido Laborista, Gordon Brown, amenazó con publicar listas con nombres de diputados tories que han recibido fuertes incrementos salariales en el último año.

Al margen del revuelo que causaron ayer las declaraciones del ministro de Hacienda, los delegados sindicalistas nombraron a sus nuevos líderes al término de su congreso anual, celebrado en Brighton. Por una parte, Jimmy Knapp, el influyente responsable del Sindicato de los Ferrocarriles y Transporte Marítimo, fue nombrado, nuevo presidente del TUC. Por otra, los delegados aprobaron por unanimidad a su nuevo secretario general, John Monks, quien sustituye al legendario, Norman Willis.

El TUC aprobó igualmente la readmisión del Sindicato de Electricistas al seno de esta asociación nacional que fue fundada en 1886. Tras un duro debate, los delegados votaron a favor del retorno de los electricistas, hecho que se produce cinco años después de su expulsión por una presunta invasión en el terreno de otras organizaciones sindicales.

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