Crítica:

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11.35 / Tele 5

España, 1966 (100 minutos). Director: Luis César Amadori. Intérpretes: Rocío Dúrcal, Enrique Guzmán. Musical.



No hay nada como volver a casa para escuchar los gorgoritos afinados de la sempiterna pizpireta, la marisabidilla jacarandosa, la niña prodigio que hizo de las suyas hasta en La Mancha. Aquí la tenemos, más bonita que ninguna, perdiendo los estribos por culpa de un charro con menos escrúpulos que un curandero de Misterios sin resolver. El caradura la quiere seducir, pero la niña -que ya es toda una mujer- impone las regla...

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11.35 / Tele 5

España, 1966 (100 minutos). Director: Luis César Amadori. Intérpretes: Rocío Dúrcal, Enrique Guzmán. Musical.

No hay nada como volver a casa para escuchar los gorgoritos afinados de la sempiterna pizpireta, la marisabidilla jacarandosa, la niña prodigio que hizo de las suyas hasta en La Mancha. Aquí la tenemos, más bonita que ninguna, perdiendo los estribos por culpa de un charro con menos escrúpulos que un curandero de Misterios sin resolver. El caradura la quiere seducir, pero la niña -que ya es toda una mujer- impone las reglas de la casta Castilla. Hasta ahí podíamos llegar. Bien, Rocío.

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