NECROLÓGICAS

Keith Lester, maestro y coreógrafo

El bailarín y coreógrafo Keith Lester ha muerto la pasada semana en Londres, a la edad de 89 años. Había nacido en Guildford el 9 de abril de 1904, y Su prestigio en el Reino Unido era de verdadera reverencia dentro del mundo profesional del ballet académico. Su importancia como formador de artistas ha sido ampliamente reconocida y varias generaciones de bailarines ingleses pasaron por sus manos y su preciosista magisterio. Su carrera como bailarín arranca en 1923 de la mano de Mijaíl Fokin; fue pareja de Lydia Kyasht, Tamara Karsávina, Olga Spessítseva e Ida Rubistein, y con esta última bailé...

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El bailarín y coreógrafo Keith Lester ha muerto la pasada semana en Londres, a la edad de 89 años. Había nacido en Guildford el 9 de abril de 1904, y Su prestigio en el Reino Unido era de verdadera reverencia dentro del mundo profesional del ballet académico. Su importancia como formador de artistas ha sido ampliamente reconocida y varias generaciones de bailarines ingleses pasaron por sus manos y su preciosista magisterio. Su carrera como bailarín arranca en 1923 de la mano de Mijaíl Fokin; fue pareja de Lydia Kyasht, Tamara Karsávina, Olga Spessítseva e Ida Rubistein, y con esta última bailé en la ópera de París, todo lo cual le dio una merecida fama de partenaire de lujo. Luego demostró su experiencia como maestro de pas de deux, para muchos el mejor de su tiempo. Fue discípulo predilecto de Serafina Astafieva, Nicolás Legat y el propio Fokin. Lester, con el tiempo, devino en alma máter de la Royal Academy of Dancing, contribuyendo con todo su saber a prestigiar la didáctica de esa institución.Keith Lester ha sido injustamente olvidado por los historiadores en su papel dentro de la etapa fundacional del ballet inglés, que tuvo su punto culminante con la creación de David (1935) para la Markova-Dolin Company. De su obra, el Grand pas de quatre (1936) marcó un punto importante en la recreación del romanticismo en el siglo XX, también relegado por la versión que hizo Anton Dolin de la misma pieza en 1940. Años después, Alicia Alonso utilizó sus. recuerdos personales del trabajo de Lester alrededor del mítico cuarteto de divas para su propia versión, brillante y respetuosa, del primero.-

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