La televisión es la asignatura pendiente del Parlamento"

JOSÉ MIGUEL LARRAYA, No soplan buenos vientos para la televisión. Las críticas, procedentes de los mas diversos sectores sociales, se amontonan para denunciar la telebasura, esa mezcla de esperpento y violencia que inunda los hogares.

Pregunta: ¿Cómo se encajan estas críticas desde un puesto directivo?

Respuesta: Hay alguna televisión que se acerca bastante a la basura o a algo que se le parece mucho. El gran riesgo que había al principio era que nos deslizáramos también por la senda de, la ordinariez, y del mal gusto, de la telebasura. Pero la irrupci...

JOSÉ MIGUEL LARRAYA, No soplan buenos vientos para la televisión. Las críticas, procedentes de los mas diversos sectores sociales, se amontonan para denunciar la telebasura, esa mezcla de esperpento y violencia que inunda los hogares.

Pregunta: ¿Cómo se encajan estas críticas desde un puesto directivo?

Respuesta: Hay alguna televisión que se acerca bastante a la basura o a algo que se le parece mucho. El gran riesgo que había al principio era que nos deslizáramos también por la senda de, la ordinariez, y del mal gusto, de la telebasura. Pero la irrupción de un proyecto como el que hemos planteado ha obligado a moverse en cierto modo a TVE, porque sobre todo la TVE-1 estaba siguiendo la senda de Tele-5. Y todavía hay cosas incomprensibles. No entiendo por qué hay un strip-tease después de un programa de entrevistas los viernes en La 2 a las 23.30. No creo que el dinero público tenga que ser para eso. Creo que la irrupción de Antena 3 ha frenado ese deslizamiento y ha marcado las posiciones. Telebasura la hay, pero nosotros no estamos ahí para hacerla.

P: Los índices de audiencia no acompañan, por el momento, las cuantiosas inversiones realizadas. ¿Lo vive con angustia?

R: Ninguna angustia. Nos hemos colocado con cerca de un 20% de promedio y ésa es una posición eficaz desde el punto de vista publicitario. Antena 3 Televisión, en lo que va de año, está por encima de sus propias previsiones de venta publicitaria. Es cierto que hay un cierto rellano en ese ascenso y que cuesta mucho superar ese 20%, pero, por otro lado, nos hemos acercado a eso que los publicitarios llaman un target eficaz de venta: gente con mayor cultura y con mayor capacidad de consumo. Hay publicitarios a quienes les interesa más un 20% determinado que un 24% de otro tipo. Y ahí están las cuentas para demostrarlo.

P:¿Se puede dirigir una cadena y presentar todos los días un telediario?

R: Mi idea no era hacer un informativo diario, sino un programa semanal. Pero Antonio Asensio me planteó que era mejor, al principio, hacer un programa diario, que daba más imagen de continuidad y ayudaba a la imagen de credibilidad que aparecía en una encuesta que él tenía sobre mí y me pareció bien. Pero es una situación transitoria.

P: ¿Antena 3 busca en el empresario venezolano Gustavo Cisneros medios para financiarse?

R: No estamos buscando dinero extranjero o nacional para financiar el proyecto. Con Cisneros hay conversaciones y si terminan de forma positiva se producirá su entrada, pero será una participación moderada. Entre otras cosas porque la participacíón accionarial ya está tomada. En estos momentos sólo hay un 10% por colocar. Hay además una mayoría sólida que lidera Antonio Asensio de forma no sólo solvente y rotunda sino diaria y directa. Asensio se pasa doce horas diarias en Antena 3.

P: ¿Hay espacio para todas las cadenas de televisión en el actual mercado?

R: Creo que la asignatura pendiente del Parlemento es ordenar el mapa audiovisual. Aquí hay tres tipos de televisión y una ley para cada una de ellas. TVE tiene su estatuto; las autonómicas se rigen por el tercer canal y las otras por la ley de televisiones privadas. Y muchas veces no hay un tronco común legislativo y en algunos asuntos tenemos más obligaciones de las que tienen las televisiones públicas. Creo que la nueva legislatura lo que tiene que hacer con absoluta urgencia es ordenar y armonizar la legislación adaptandola a la legislación comunitaria. Nosotros estamos haciendo más trabajo de servicio público -de defensa de la identidad española- que el que están haciendo algunas televisiones públicas que reciben extraordinarias subvenciones.