Pastoriza: "El problema del Atlético es Gil"

El entrenador argentino José Omar Pastoriza, que ocupó durante 35 días el cargo de director técnico del Atlético de Madrid desde que le contrataron hasta que renunció, considera ahora tras su experiencia que "el principal problema del equipo es el presidente del club, por el ambiente hostil que crea a su alrededor". Para el Pato Pastoriza, el Atlético de Madrid tiene una plantilla que no es inferior en calidad a la de ningún otro equipo español, "pero en ese club la mayoría le tiene miedo al presidente, y es muy difícil trabajar y jugar en esas condiciones".

En el bar del hotel Nogaró d...

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El entrenador argentino José Omar Pastoriza, que ocupó durante 35 días el cargo de director técnico del Atlético de Madrid desde que le contrataron hasta que renunció, considera ahora tras su experiencia que "el principal problema del equipo es el presidente del club, por el ambiente hostil que crea a su alrededor". Para el Pato Pastoriza, el Atlético de Madrid tiene una plantilla que no es inferior en calidad a la de ningún otro equipo español, "pero en ese club la mayoría le tiene miedo al presidente, y es muy difícil trabajar y jugar en esas condiciones".

En el bar del hotel Nogaró de Buenos Aires, donde se aloja la delegación del Talleres de Córdoba cuando juega en la capital argentina, Pastoriza bebe su café con el gesto calmado y la mirada serena del que ha dicho ya, en su momento y a quien corresponda, todo lo que tenía que decir: "Así es, después del partido con el Rayo, que ganamos a pesar de no jugar bien, el presidente tuvo una actitud de desprecio con Villarreal y algún otro jugador. Al día siguiente hablé con él y con Rubén Cano, les dije que no iba a permitir eso y discutimos bien, sin agresiones. Cada uno mantuvo su posición. El presidente no quería que jugara Villarreal y yo le expliqué que, si no estaba Schuster, era lógico que jugaran juntos Villarreal y Vizcaíno. El dijo entonces que tomaría las decisiones o no firmaría el contrato y yo le contesté, que, como no me bajo los calzones ante nadie, que me pagara mi trabajo hasta ese día porque yo me iba".Pastoriza se ha quedado tan limpio de conciencia. que hasta contesta que "sí" cuando se le pregunta si volvería a dirigir al Atlético: "Volvería porque, si me vuelven a llamar, ellos ya saben quién soy y cómo pienso. El presidente ha dicho que tiene 200 entrenadores a su disposición y es cierto. Es tan cierto como que yo no soy como ninguno de esos 200". A su regreso a Buenos Aires, Pastoriza fue contratado nuevamente por el Talleres de Córdoba y el equipo ha recuperado estilo y posiciones en la Liga argentina. Ya no le resultará tan sencillo irse del país.

Ambición política

Cuando recuerda la personalidad de Jesús Gil y Gil en el tiempo que le trató a diario, Pato Pastoriza insiste en que todo se debe "a la necesidad de que hablen de él" y "a sus ambiciones políticas". "A él no le interesa lo que dicen, sólo quiere que la prensa hable. Para mí es un provocador que hace todo de forma deliberada porque quiere mantenerse en el más alto índice de publicidad. Él está orgulloso de las encuestas que dicen que es tan conocido por los españoles como Felipe González. Por lo que hemos hablado, me parece que su ambición es sólo política. El Atlético le sirve como un escalón en esa carrera. Él cree que puede vencer al socialista y piensa en llegar a ser primer ministro. Es un hombre muy de derechas, de ultraderecha diría yo".Las ambiciones políticas de Jesús Gil y Gil las descubrió Pastoriza por sus conversaciones informales. "Él sabía que Menem había lanzado su campaña en mi restaurante de Buenos Aires y me preguntaba mucho sobre el presidente. argentino. Quería conocerlo personalmente y como sabía que la Embajada argentina me había invitado a una recepción en Madrid el día 29 de marzo, que después se suspendió, me preguntó si se lo podría presentar. Siempre hablábamos casi tanto de política como de fútbol. En realidad, de fútbol no sabe nada y como yo le decía que él no podía opinar, tal vez era eso lo que le molestaba".

Sobre la contratación de Villarreal, el entrenador argentino no tiene dudas: "Lo volvería a recomendar". El presidente del Atlético le había ofrecido al brasileño Moacir, pero Pastoriza no lo conocía y optó, ante la urgencia, por lo que creyó mejor: "Necesitaba un jugador en el centro del campo y elegí a Villarreal porque le conozco muy bien. Si Villarreal lleva varios años de titular en el Boca, uno de los dos equipos más importantes del país, y si además es titular en la selección argentina, no todos los entrenadores que confiamos en sus condiciones podemos estar tan equivocados". Para Pastoriza, el problema consiste en tener que explicarle cuestiones elementales del fútbol a quien se cree que sabe del tema porque se ha comprado un club. "Un futbolista no es un automóvil, que se lleva y se trae y anda igual en todas partes. Un jugador necesita tiempo para adaptarse".

Temor en el club

Pastoriza piensa que si la discusión no era a causa de Villarreal, hubiera sido por cualquier otra razón. "Como a su alrededor todos le tienen miedo, no soporta a quien le discute. Para mí lo que queda de todo esto, además de conseguir mejorar los resultados del equipo y de superar la eliminatoria en la UEFA, es la actitud de algunos jugadores, que se enfrentaron a él cuando se enteraron de mi renuncia. También la amistad de un señor como Iselín Ovejero, y las palabras que me dijo el hijo del presidente cuando se despidió de mí: 'Si hubiera más cojonudos como usted, el mundo sería otra cosa'. El hijo del presidente podría hacer mucho más por el Atlético que su padre, pero comprendo que no pueda enfrentarse a él".

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