Entrevista:

"El de ahora es el fútbol de siempre"

Arsenio Iglesias decidió colgar el chandal de entrenador hace poco más de un año porque se sentía "hastiado del fútbol". Acababa de ascender otra vez al Deportivo después de una temporada de pesadilla. Llevaba 20 años en banquillos de equipos modestos y quiso jubilarse en el despacho. No contaba con que una promoción de permanencia se interpondría en sus planes. Cumplió con su papel de salvar a su equipo del descenso y a los 60 años se ha encontrado el conjunto de más calidad que tuvo en su vida.

La actual trayectoria del Deportivo no ha cambiado a Arsenio. El técnico gallego mantiene ese habitual talante de viejo hombre de fútbol que no se deja llevar por la euforia de un éxito efímero. "Estaré satisfecho con lograr una buena clasificación y que el equipo juegue dignamente", afirma con su tradicional modestia. Es el entrenador más veterano de Primera División pero no le importa. Cree que "el fútbol de ahora es el fútbol de siempre".Pregunta. Usted había decidido abandonar el fútbol la pasada temporada y ahora vive uno de los mejores momentos de su carrera. ¿No es una situación ...

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La actual trayectoria del Deportivo no ha cambiado a Arsenio. El técnico gallego mantiene ese habitual talante de viejo hombre de fútbol que no se deja llevar por la euforia de un éxito efímero. "Estaré satisfecho con lograr una buena clasificación y que el equipo juegue dignamente", afirma con su tradicional modestia. Es el entrenador más veterano de Primera División pero no le importa. Cree que "el fútbol de ahora es el fútbol de siempre".Pregunta. Usted había decidido abandonar el fútbol la pasada temporada y ahora vive uno de los mejores momentos de su carrera. ¿No es una situación un poco extraña?

Respuesta. En la vida nunca te puedes hacer planteamientos. Me marché para no volver porque estaba tremendamente aburrido. Me quedaba en el club para hacer por ahí cualquier cosa que necesitasen. Tuve que coger el equipo porque entendieron que tenía que ser así. No me apetecía mucho, no estaba mentalmente preparado y lo pasé muy mal, sobre todo en el partido de promoción. Al final, me apeteció quedarme, me dieron la oportunidad y estoy muy a gusto.

P. ¿Qué fue lo que ocurrió para que dejara de aburrirle el fútbol?

R. El año del ascenso me cansé mucho porque creo que hubo unas exigencias tremendas y no quise aguantar más. Después de todo eso, cuando la gente vio otras cosas, se dio cuenta de que yo no cometía tantas equivocaciones y de que todos nos equivocamos. La gente quiso ser un poco más complaciente y yo me sentí de nuevo más a gusto. Lo que no cabe duda es que a mí me gusta entrenar porque es lo que he hecho toda la vida.

P. Por primera vez está al' frente de un equipo con figuras internacionales como Bebeto o Mauro Silva. ¿Es más fácil que dirigir un conjunto modesto?

R. Bastante más.

P. ¿Cuál es la diferencia?

R. La gente entiende perfectamente cuando le hablas claro. Estos jugadores van a resolver todos los problemas que puedas plantear. Cuanto menos calidad tienes, más te vuelves loco, más difícilmente puedes llevar a cabo ideas que puedas tener. Aunque las ideas no son nada del otro mundo. El fútbol es el fútbol de siempre: el fútbol de jugar la pelota. El fútbol de que cada cual juegue en su sitio y que cuando tiene ocasión entre, o defienda, o ataque.

P. La mayoría de los entrenadores de su generación se han retirado...

R. Porque no tomaron jalea real en su tiempo... je, je.

P. ¿Y usted cómo hizo para sobrevivir?

R. Circunstancias o rachas. Nunca sabes. Cuando me marché de La Coruña me fui a Alicante y allí me encontré con un equipo formidable, el Hércules, que yo no había hecho. Tienes que encontrar esta circunstancia, que muchas veces no depende de ti, sino de un conjunto de gentes: una directiva, unos empleados, unos técnicos, unos jugadores... ¡quién sabe! Muchas veces, cuando menos lo piensas todo te sale mal y no sabes por qué. Las cosas a veces se arreglan solas y otras se hunden solas por mucho que tú quieras atajarlas.

P. ¿Cuáles son sus ideas básicas sobre el fútbol?

R. Yo creo que hay dos aspectos. Cuando tiene la pelota el contrario, hay que tratar de tapar bien y hacerte con ella, pero no como un loco, sino allí donde puedas ganarla con la seguridad de no regalar terreno como para que te causen perjuicio. Cuando la tienes tú, tendrás que hacer lo contrario: que tu equipo se sitúe adecuadamente, no para defender, sino para ganar. Y que la pelota circule mucho, que la gente se desmarque, que. apoye bien, que sepa irse al ataque. No hay ningún secreto.

P. ¿A lo largo d e su carrera ha apreciado grandes innovaciones tácticas?

R. No, porque siempre van poco a poco. Tiene que haber transformaciones al pasar los años. Pero eso no quiere decir que a la hora de jugar todo sea lo mismo. Siempre van a ser posiciones de hombres en el campo que tienen su marca y la situación es la misma: cuando tienes la pelota y cuando no la tienes. Pero eso va a depender de la calidad de tus hombres.

P. En la Liga española se habla sobre todo de los sistemas de Floro y de Cruyff, al que algunos han llamado suicida. ¿Qué opinión. tiene de ellos?

R. En esto tienen mucha importancia los medios de comunicación, que están hablando del sistema Floro y la gente se pregunta ¿pero hay sistemas? Porque antes no se hablaba nunca de esto. Cruyff ya jugaba así desde hace mucho tiempo, ya lo hacía en el Ajax. Yo incluso creo que ahora está jugando con más seriedad defensiva. Cuando cogió al Barcelona, Koeman jugaba más por delante de las defensas que ahora. Creo que ha equilibrado su sistema, que es muy sencillo pero tremendamente eficaz. El Atlético de Madrid es quizás el equipo que más definido tiene su sistema, con un buen bloque defensivo y un contraataque rapidísimo. Al Atlético siempre lo consideraron de segunda línea y creo que no es así.

P. Durante muchos años ha arrastrado la fama de conservador. ¿Le molestaba eso?

R. No, no, estaba acostumbrado. Yo tengo mi forma de pensar y no me importa mucho lo que digan. En absoluto.

P. ¿Pero era conservador por la calidad de jugadores que dirigía?

R. Los jugadores son los que demandan esa necesidad. Porque usted sabe bien que si el Barcelona no tuviera esa gran calidad no podría tener esa gran posesión de pelota y no, podría ser un equipo atacante.

P. ¿Hasta dónde puede llegar este Deportivo?

R. Esto es lo que no sabemos. Nosotros tenemos mucha ilusión y pelearemos por llegar lo más alto posible.

P. ¿Le gustaría seguir muchos años más en el banquillo?

R. No lo sé, esto nunca se sabe. Vendrán otras gentes empujando... No quiero hablar del futuro. Estoy contento con estar y trabajar con la mayor honestidad posible. Si me siento con fuerzas y me dan la posibilidad...

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