Incidentes y suspensión
El partido de vuelta de la Copa de la UEFA que enfrentaba ayer en Salónica al PAOK y, al Paris Saint-Germain tuvo que ser suspendido después del descanso debido a los incidentes provocados por los aficionados griegos, quienes lanzaron numerosos objetos sobre el terreno de Juego.Ambos equipos reaparecieron en el césped para empezar la segunda parte, pero el árbitro, el holandés John Blankenstein, no estimó oportuno reanudar el partido "porque la seguridad de los jugadores no estaba garantizada". El Paris Saint-Germain, que ya había ganado por 2-0 en el partido de ida, dominaba ayer por idéntico...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
El partido de vuelta de la Copa de la UEFA que enfrentaba ayer en Salónica al PAOK y, al Paris Saint-Germain tuvo que ser suspendido después del descanso debido a los incidentes provocados por los aficionados griegos, quienes lanzaron numerosos objetos sobre el terreno de Juego.Ambos equipos reaparecieron en el césped para empezar la segunda parte, pero el árbitro, el holandés John Blankenstein, no estimó oportuno reanudar el partido "porque la seguridad de los jugadores no estaba garantizada". El Paris Saint-Germain, que ya había ganado por 2-0 en el partido de ida, dominaba ayer por idéntico resultado en el momento de la suspensión.
Los incidentes estallaron en el descanso en la tribuna 4 del estadio Toumba de Salónica, en la que estaban los aficionados locales más fanáticos. Éstos intentaron invadir el terreno de juego.