"A veces no sé dónde estoy en el campo", afirma Prosinecki

Robert Prosinecki, uno de los futbolistas que más preocupan en el Real Madrid por su estado de forma, reiteró ayer sus dudas actuales sobre sí mismo: "A veces, no sé donde estoy en el campo. Ni tengo confianza, ni estoy a tope, ni golpeo fuerte a la pelota. Tengo miedo. Sé que esto se va con el tiempo, con entrenamientos y partidos, pero poco a poco. No se puede solucionar todo de golpe". Benito Floro, el' técnico, no quiso comentar sus declaraciones: "Tuvo una lesión complicada y hay que entenderle".El jugador yugoslavo se pasó casi en blanco la temporada pasada por sus repetidos problemas mu...

Robert Prosinecki, uno de los futbolistas que más preocupan en el Real Madrid por su estado de forma, reiteró ayer sus dudas actuales sobre sí mismo: "A veces, no sé donde estoy en el campo. Ni tengo confianza, ni estoy a tope, ni golpeo fuerte a la pelota. Tengo miedo. Sé que esto se va con el tiempo, con entrenamientos y partidos, pero poco a poco. No se puede solucionar todo de golpe". Benito Floro, el' técnico, no quiso comentar sus declaraciones: "Tuvo una lesión complicada y hay que entenderle".El jugador yugoslavo se pasó casi en blanco la temporada pasada por sus repetidos problemas musculares. En la presente, su recuperación iba bien hasta que en la segunda jornada, ante el Burgos, recibió un golpe en la cicatriz de su última operación y cundió la alarma.

Pero la preocupación del Madrid no se reduce a Prosinecki. Aparte de él, la relación de tocados es amplia: Buyo, Maqueda, Chendo, Llorente, Michel, Zamorano, Hierro y Rocha. Según Miguel Ángel Herrador, el jefe de sus servicios médicos, tanto Hierro, con dolencias estomacales, como Rocha, con un golpe en un tobillo, y el propio Prosinecki podrán intervenir el sábado ante el Albacete. Peor lo tienen Michel, con una talalgia en el talón derecho, y Zamorano, con una sobrecarga muscular. "No están descartados, pero casi", dijo. Los otro cuatro lastimados son bajas seguras.

Floro, que no ocultó su inquietud al respecto, se mostró tranquilo por el juego de su equipo, aunque reconoció que no es el deseado: "Hay fases en que actúa lento, con parsimonia, dando tiempo al contrario a pensar. Hace falta un ritmo más vivo. No carecemos de profundidad, sino de precisión en el remate".