Miriam Blasco, la campeona olímpica y mundial, se retira de la competición

La yudoca Miriam Blasco, medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Barcelona, ha anunciado oficialmente su retirada al mes de haber logrado el triunfo en el Palau Blaugrana barcelonés en la categoría de los 56 kilos.Miriam, de 28 años, que tras su participación en los Juegos no había vuelto a competir, maduraba esta idea desde que el pasado año logró en el mismo escenario el título de campeona del mundo de la especialidad. Sin embargo, no se decidía porque le gusta mucho la competición. La razón principal que la ha llevado a tomar su, decisión la desveló. ayer: "La necesidad de dedicarme a la ...

La yudoca Miriam Blasco, medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Barcelona, ha anunciado oficialmente su retirada al mes de haber logrado el triunfo en el Palau Blaugrana barcelonés en la categoría de los 56 kilos.Miriam, de 28 años, que tras su participación en los Juegos no había vuelto a competir, maduraba esta idea desde que el pasado año logró en el mismo escenario el título de campeona del mundo de la especialidad. Sin embargo, no se decidía porque le gusta mucho la competición. La razón principal que la ha llevado a tomar su, decisión la desveló. ayer: "La necesidad de dedicarme a la vida familiar y plantearme objetivos personales como la maternidad, que debido a mi dedicación exclusiva al deporte me fueron imposibles de acometer hasta ahora", dijo.

También han influido en esta retira da la lejanía de los Juegos de Atlanta, en 1996, y el logro de todos los éxitos posibles dentro del yudo, así como el reconocimiento a su carrera con la concesión del Premio Reina Sofía, la medalla de oro de la Federación Española de Yudo y premios a la mejor deportista local y provincial, entre otros.

El futuro deportivo de la judoca está en su integración en la dirección técnica del Yudo Club Alicante, vacante desde que en el mes de mayo falleció su entrenador Sergio Cardell. Desde 1988, en que Miriam empezó a destacar a nivel nacional, la preparación a la que estaba sometida por Sergio Cardell fue intensiva con el objetivo de acudir a los Juegos de Barcelona. Después de la tragedia, José Antonio Arruza asumió con éxito su relevo en la preparación de la campeona.