El PCE quiere ser una corriente dentro de IU
El Partido Comunista de España (PCE) se mantendrá como corriente dentro de Izquierda Unida (IU) y continuará existiendo como partido, al tiempo que "apuesta clarísimamente por la culminación del proceso de la asunción plena de soberanía por parte de IU". Ésta es la principal conclusión de un documento aprobado ayer tarde por la comisión política del PCE y que se debatirá hoy en el comité central del partido.
El documento es una propuesta de Julio Anguita que trata de encontrar el máximo consenso en el partido para delinear el futuro del PCE, de cara al próximo congreso, en el mes de dic...
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El Partido Comunista de España (PCE) se mantendrá como corriente dentro de Izquierda Unida (IU) y continuará existiendo como partido, al tiempo que "apuesta clarísimamente por la culminación del proceso de la asunción plena de soberanía por parte de IU". Ésta es la principal conclusión de un documento aprobado ayer tarde por la comisión política del PCE y que se debatirá hoy en el comité central del partido.
El documento es una propuesta de Julio Anguita que trata de encontrar el máximo consenso en el partido para delinear el futuro del PCE, de cara al próximo congreso, en el mes de diciembre. El comité aprobó el documento, según fuentes del partido, por 22 votos a favor, uno en contra y una abstención. Las mismas fuentes señalaron que la virtualidad de esta postura es que "desaparece" el debate sobre si el PCE sigue existiendo o no como partido, y agregaron que para la dirección carece de sentido seguir debatiendo el asunto.En la parte final del documento, dedicada al Partido Comunista, se afirma: "Mantenemos con rotundidad la necesidad de la existencia y continuidad del PCE, pero también y con la misma rotundidad debemos afirmar que el mantenimiento del PCE no puede constituir, en absoluto, la justificación para que las cosas sigan estando como están, o para que nuestra militancia, o sectores de la misma, se encastillen de forma numantina en defensa de esencias, viendo como algo subalterno o extraño el proyecto de IU".
El documento pide, entre otras cosas, que "todas las corrientes en IU acepten democráticamente las decisiones que IU tome" y que prevalezca el principio de "una persona, un voto, en el momento de elegir o tomar una decisión". Se establece también, en el intento de encajar al partido como corriente en Izquierda Unida, que "el PCE no tiene ninguna responsabilidad de veto ni de trabajo general mediático hacia la sociedad".
Los militantes del PCE serán inscritos "colectivamente en el censo de IU por parte de la organización correspondiente, previa aceptación individual firmada que refleje la voluntariedad del militante".
El documento entra luego a diseñar lo que, a juicio del PCE, debe ser IU, formación a la que sitúa "en el amplio marco de fuerzas políticas que intentan construir el socialismo, entendido éste como la negación y superación económica, social, política, teórica, cultural y jurídica del capitalismo".
Más adelante explica el texto que "apostar por la construcción del socialismo es, en la coyuntura actual del mundo, apostar por un modelo alternativo de sociedad", para lo cual "una característica fundamental de IU es lo que hemos venido llamando la construcción de la alternativa".