Durán asegura que la ONCE no ve con recelo la integración de UTO en UGT
El director general de la Organización Nacional de Ciegos de España (ONCE), Miguel Durán, manifestó ayer a Europa Press que no ve con recelo ni satisfacción "la posible integración del sindicato UTO [Unión de Trabajadores de la ONCE] en UGT, pues son independientes uno de otro". Las dos fuerzas sindicales mantienen conversaciones para la mencionada integración (véase EL PAÍS del domingo 29 de septiembre).Según Durán "cada sindicato tiene que cumplir su papel. Nosotros somos la dirección de la ONCE y tenemos que defender los intereses de la institución. En España existen 36.000 ciegos, d...
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El director general de la Organización Nacional de Ciegos de España (ONCE), Miguel Durán, manifestó ayer a Europa Press que no ve con recelo ni satisfacción "la posible integración del sindicato UTO [Unión de Trabajadores de la ONCE] en UGT, pues son independientes uno de otro". Las dos fuerzas sindicales mantienen conversaciones para la mencionada integración (véase EL PAÍS del domingo 29 de septiembre).Según Durán "cada sindicato tiene que cumplir su papel. Nosotros somos la dirección de la ONCE y tenemos que defender los intereses de la institución. En España existen 36.000 ciegos, de los que 15.000 son trabajadores de la organización". "A la dirección de la ONCE -prosiguió- le interesa que los sindicatos sean dialogantes en orden al mejor funcionamiento de esta institución".
En cualquier caso, la integración de la UTO en el sindicato liderado por Nicolás Redondo abre un horizonte en el que vislumbran cambios significativos en las relaciones de la organización de ciegos con el Gobierno y el PSOE. Durante los últimos años, la ONCE ha mantenido enfrentamientos con el ministro de Economía, Carlos Solchaga, por la incidencia que tienen los cupones en las loterías que controla Hacienda. Con la ministra de Asuntos Sociales, Matilde Fernández, las relaciones han sido cordiales.
Precisamente, en este sentido, recientemente el consejo general de la ONCE presentó a Asuntos Sociales una propuesta de abono-cupón, para sustituir el que fue prohibido por el Gobierno porque no se había solicitado autorización. El nuevo cupón tiene ligeras diferencias con el anterior, aunque no básicas. Sin embargo, al haberse pedido autorización tiene más visos de que sea permitido.