Entrevista:TOUR DE FRANCIA 1991

"LeMond tampoco lo tiene fáciI"

José Miguel Echávarri puede considerarse también como un hombre Tour. Desde que inició su aventura francesa con el Reynolds, en 1983, no ha parado de intentar la búsqueda de lo más alto. Ha disfrutado de años muy difíciles, pero también de la agradable experiencia de tener corredores compitiendo por el amarillo. Buscó a Delgado y fabricó a Induráin. Ahora ha logrado reunirlos como aspirantes. La prensa internacional le coloca en el ojo del huracán como responsable de la gran batalla que ha de venir en este Tour.

Pregunta. ¿Cuál es su favorito para ganar el Tour?Respuesta. En ...

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José Miguel Echávarri puede considerarse también como un hombre Tour. Desde que inició su aventura francesa con el Reynolds, en 1983, no ha parado de intentar la búsqueda de lo más alto. Ha disfrutado de años muy difíciles, pero también de la agradable experiencia de tener corredores compitiendo por el amarillo. Buscó a Delgado y fabricó a Induráin. Ahora ha logrado reunirlos como aspirantes. La prensa internacional le coloca en el ojo del huracán como responsable de la gran batalla que ha de venir en este Tour.

Pregunta. ¿Cuál es su favorito para ganar el Tour?Respuesta. En este momento no hay un solo favorito. Otorgo un alto porcentaje a LeMond, pero hay otros.

P. LeMond tiene este año más ventaja que nunca y en ocasiones anteriores ha demostrado capacidad suficiente para administrar rentas menores.

R. Cierto, pero no estamos hablando del pasado. Este año todavía no se ha visto su comportamiento en la montaña. Si está en la montaña con la misma fortaleza que en el llano, será muy difícil batirle, pero nos queda la gran incógnita y la gran ilusión de plantarle cara en ese terreno, porque nos es más favorable. LeMond tampoco lo tiene fácil.

P. Los observadores y especialistas conceden el mando e las operaciones al equipo Banesto. ¿Usted lo acepta?

R. No. Acepto que tengo más posibilidades que nadie y más hombres con los que jugar que nadie, pero las operaciones las tiene que llevar el líder. No va a ser Banesto contra LeMond. Habrá factores ajenos a la clasificación que van a intervenir en ella: hay hombres que hoy están a ocho o nueve minutos y cuyo objetivo es ganar una etapa, y los colombianos,por ejemplo, están esperando la montaña como agua de mayo. Además, también hay que tener en cuenta a Theunisse, Rooks o Fignon, que todavía no han dicho nada. Todos ellos harán que la carrera no sea un duelo entre LeMond y Banesto. Nosotros, colocando hombres delante, podemos mover y desgastar a LeMond. Evidentemente, la lucha de fondo será entre nosotros y él, pero no significa que tengamos que llevar el mando de las operaciones..

P. A la hora de preparar una estrategia para este Tour, ¿no es más complicado tener tres hombres bien situados y con posibilidades, que uno solo?

R. Lógicamente, es más complicada. Son tres hombres distintos, tres formas de ver las cosas, un francés y dos españoles. Uno, Pedro, es el rey; otro, Induráin, es el príncipe que llega. Es difícil dirigir una operación de tres cuando el beneficido va a ser uno y los otros dos se tienen que descolgar. Yo, lo he dicho desde el principio del Tour, pienso que la carrera será la que determine quién ha de ser el líder del equipo. Hay que esperar a Val Louron, a ver cómo van las cosas en los Pirineos, para saber si los tres hombres que tenemos son capaces de estar después de los Pirineos.

P. El teórico número uno, Pedro Delgado, es el que más lejos se encuentra de LeMond. ¿Qué dudas tiene en estos momentos usted sobre Delgado?

R. No tengo ninguna. Delgado ha hecho hasta ahora un Tour totalmente desconectado, ajeno a cualquier batalla de los primeros puestos, ahorrando energía. Evidentemente, le van a pesar esos minutos que lleva de diferencia con el líder, pero, al contrario de otros años, Delgado no es nuestro único líder. Su papel es muy importante, pero el objetivo de Banesto es que uno de los nuestros esté arriba. Tenemos que olvidarnos de nombres y nacionalidades. Pero con Pedro delante y con Miguel de freno para LeMond, la situación puede cambiar mucho.

P. La mayoría de los corredores llevan muchos días sin tocar la montaña. ¿Tiene en cuenta esto?

R. No sólo eso. El día de teórico descanso, que no lo es, pues es de traslado, va a complicar mucho las cosas a la gente. Pero no hay que olvidar que ese primer contacto con la montaña lo va a ser para todos, incluso para nosotros, por lo que. no habrá ventajas. Le tenemos mucho respeto a esa etapa, porque siempre, siempre, hay algún favorito que se cae. Pese a ello, hay que guardarlo todo para la etapa de Val Louron. No vale la pena tirar esfuerzos. En ese momento habrá que marcar la diferencia.

P. Y sobre Induráin, ¿tiene alguna duda?

R. Tampoco. Ninguna. Me parece uno de los corredores más sólidos del pelotón.

Dudas sobre Bernard

P. ¿Y Bernard?

R. Ahí sí que tengo dudas, por su trayectoria y su historia. Aunque con una particularidad. Por la manera en que está corriendo, lo veo en una situación psicológica y física como nunca lo había visto, debido a esa falta de responsabilidad que él siempre ha acusado. Tengo que utilizarlo, porque, en definitiva, lo que necesito es hombres que tiren. Si lanzo a Magro, LeMond no se va a preocupar, pero si lanzo a Bernard, sí. Es un hombre muy difícil de batir que, además, en la contrarreloj va muy bien. Por lo tanto, sobre Bernard sí que tengo dudas, aunque no me va a extrañar nada de lo que haga.

P. ¿Tiene diseñada la etapa de Val Louron?

R. La hemos hecho varias veces. Sólo cambia el final. Lo sabemos de carrerilla. No tiene ningún secreto. Bueno, sí, uno: que respondan los hombres. ¿Cómo ve a sus hombres?

R. Miguel está tranquilo, en una condición óptima. Piensa más en Banesto que en él. Para, Bernard esto es la confirmación de lo que hizo en el Giro. Está sereno, muy bien. Pedro está tranquilo, pero sabe que es el que más tiempo ha perdido.

P. ¿Y LeMond? ¿Lo ve con fuerzas para aguantar?R. Hay dos LeMond. El de aquí no tiene puntos débiles. El creo que el otro tiene miedo de la montaña. Yo lo he visto más frágil en la montaña que en otros terrenos.

P. Delgado siempre ha estado convencido de que LeMond le ha ganados los dos últimos años por suerte...

R. Yo también lo creo. Ha vencido, pero no ha convencido. El año que ganó a Fignon fue porque nosotros nos dimos de tortas y él ganó. El año pasado ganó, pero no con esa superioridad tan clara. Pedro es uno de los convencidos de que LeMond va a caer.

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